La vida privada y profesional de Woody Allen ha estado en boga, desde que surgió como figura en el mundo del entretenimiento. Su complicada unión con Mia Farrow y consecuente romance con Soon-Yi Previn, hija adoptiva de la actriz, dejó a todos en shock.
Pero, después de que salieran cientos de artículos relacionados al increíble momento, el director se atrevió a tocar el tema para The Hollywood Reporter, declarándose “inmune” ante cualquier comentario de su polémico matrimonio con Previn.
“Me mantuve trabajando, sin disminuir el ritmo. Hice películas todos esos años, como siempre. Me sentí bien de esa manera. Soy muy disciplinado y monomaníaco. Ella (Soon-Yi) sabe de mis caprichos. Me comprende… ella es una de las grandes experiencias de mi vida”, opinó Allen.
Contó que su esposa tuvo una infancia difícil en Corea. Era huérfana y se mantenía en las calles. La habían internado en un orfanato donde Mia junto con su ex pareja André Previn la conocieron. Pronto la llevaron a los Estados Unidos como su hija adoptiva.
“Hice que su vida fuese mucho mejor. Le di enormes oportunidades. Obtuvo su título universitario. Ahora es sofisticada y viaja por toda Europa. Es una persona distinta. Las contribuciones que hice en su vida me han dado más placer que cualquiera de mis filmes”, reveló Woody.
Allen no comenzó el romance con la hija de Mia, hasta que ella ingresó en la universidad. El que la tratara desde joven, mientras tenía una relación con Farrow, lo hizo bastante desagradable. Para el público Woody era su padrastro, así no fuese legal.
Los hijos de Farrow y Allen rechazaron el comportamiento del cineasta. Ronan Farrow destacó: “Es repugnante. Al casarse con mi hermana me convirtió además de su hijo en su cuñado”.
Toda la negatividad alrededor no afectó a Woody, según él. “Nunca, nunca, he leído nada sobre mí. Nunca leí críticas de mis películas. He evitado cualquier preocupación por mí mismo”, aseguró el director.
De Farrow negó mantener contacto y desconoció saber dónde se encontraba ahora. “No creo que viva en Nueva York. Creo que vive en Connecticut. No estoy seguro. O tal vez viaja como embajadora para UNICEF… algo así”, finalizó.