Amanda Miguel y Diego Verdaguer se conocieron en su natal Argentina en 1975 y desde entonces sintieron una conexión especial el uno por el otro. Como ella era egresada de un conservatorio de música en Argentina, tenía contactos que le presentaron al que posteriormente se convirtió en el amor de su vida.
Apenas escuchó la voz de Amanda, Diego le propuso ser una de sus coristas y a partir de allí se volvieron inseparables mientras viajaban juntos por Latinoamérica durante dos años, hasta que decidieron casarse y radicarse en México.
Esta decisión devino a que él ya llevaba viviendo algunos años en este país, por lo que ella tomó la decisión de quedarse y en la actualidad ambos son ciudadanos mexicanos naturalizados.
Juntos tienen una hija, a quien llamaron Ana Victoria y que nació en 1983. Ambos desearon que naciera en Estados Unidos para que de esta forma adquiriera la nacionalidad, además de aprovechar la oportunidad para comprar una casa en Los Angeles.
Aunque se podría pensar lo contrario, Amanda y Diego mantienen carreras completamente separadas, pero a la vez están más juntos que nunca. Según sus propias declaraciones, se ayudan mutuamente y sobre todo tratan de llevar la vida marital con humor y tratando de estresarse lo menos posible.
Asimismo, han realizado giras por Estados Unidos, donde ambos son bastante populares entre el público latino. Con respecto a su hija, tratan de reunirse varias veces al año, ya que Ana también se encarga de desarrollar una carrera musical y altruista que la mantiene muy ocupada.
Los tres son bastante itinerantes en cuanto a su residencia, ya que viajan mucho entre México y Estados Unidos, dependiendo de lo que amerite la ocasión. En general se describen como una familia unida y muy normal que ha logrado sobrellevar los contratiempos de la fama.