Lejos de preocuparse de más por el paso del tiempo, Sharon Stone disfruta de la sexta década y se siente orgullosa de su figura. A los 61, se ve increíble. ¿Lo último? La actriz protagonizó una sesión de fotos muy hot para la edición portuguesa de Vogue.
La diosa se animó a un jugado topless en el agua y posó sentada en un sofá, con una mirada desafiante y una actitud súper segura. Además, recreó la escena de la película que la puso en el centro de la escena: Bajos Instintos. Se cruzó de piernas y, con una mirada desafiante, posó ante las cámaras. Esta vez, sí llevaba ropa interior.
La escena del cruce de piernas interpretada por Sharon fue llamado "el momento más pausado" en la historia del cine. Sin dudas, este film hizo que se ganara un lugar de privilegio en Hollywood.
Hoy, la actriz todavía sigue pisando fuerte y se siente "más sexy" que nunca.