Nacida en 1976 en Londres, Inglaterra, Sally Hawkins estudió su oficio en la famosa Royal Academy of Dramatic Art.
Un papel cinematográfico notable se produjo en All or Nothing (2002) de Mike Leigh, y más tarde volvieron a unirse para Happy-Go-Lucky (2008), por la que ganó un Globo de Oro.
Hawkins también fue premiada por su trabajo en Blue Jasmine (2013), de Woody Allen. El diario Independent aseguró que entrar en la actuación la ayudó tanto a nivel personal como académico, pues cuando era niña sufría de dislexia.
"Estudiar lengua siempre fue un tema académico, había una barrera que me resultaba difícil de romper. Pero tan pronto como pronuncié las palabras, entendí lo que querían decir", aseguró la afamada actriz de Hollywood.
También apareció en el thriller policial Layer Cake (2004), con Daniel Craig, y volvió a formar equipo con Leigh para su drama de los años 50, Vera Drake, protagonizada por Imelda Staunton.
En 2007, su primer proyecto con el famoso director Woody Allen, Sueño de Cassandra, llegó a la gran pantalla.
Al año siguiente, Hawkins tuvo un gran avance en su carrera con un papel protagónico en Happy-Go-Lucky de Leigh, interpretando a una implacablemente alegre maestra londinense llamada Poppy.
Su hábil manejo del papel le valió una gran aclamación y un Golden Globe a la Mejor Interpretación para una Actriz en una Película: Musical o Comedia.
Experta actriz de teatro en Londres, Hawkins hizo su debut en Broadway en 2010 en una nueva versión de Mrs. Warren's Profession de George Bernard Shaw . Ese año también actuó junto a Miranda Richardson en Made in Dagenham, sobre la huelga de mujeres de 1968 en una planta de automóviles Ford en Inglaterra.
La carrera de Sally Hawkins siguió en ascenso hasta que Guillermo del Toro la llamara para estelarizar La Forma del Agua (The Shape of Water).