Fue en el año 2012 cuando el artista Roger Waters, quien se abrió paso en los escenarios junto a Pink Floyd, conversó con Howard Stern en su famoso programa radial. Durante el diálogo, afirmó que el prestigio y éxito de su banda sólo sirvieron para destruirla.
“Sin duda que la dinámica de nosotros cambió considerablemente luego de lanzar Dark Side of the Moon (1973). Ese disco nos dio mucho dinero. Recuerdo que fuimos razonablemente generosos unos con otros. Una vez logrado eso, pensás que ya la hiciste”, dijo a Stern.
Consideró que en un punto trataron de aferrarse a su marca registrada como temiendo de que algo extraño sucedería. Waters insistió en que no iban a abandonar la oportunidad que tuvieron con esa producción.
“Lo que pasó más adelante fueron las peleas entre nosotros por diferencias creativas, y por qué cada quien tenía su personalidad. Yo decidí alejarme, dejar la banda en los ochenta y que ellos hicieran sus proyectos”, comunicó.
David Gilmour, Nick Mason y Richard Wright se reagruparon para el álbum A Momentary Lapse of Reason usando el nombre de Pink Floyd, y sacando objeciones públicas y amenazas legales de Waters.
“Ahora lo veo de manera distinta. Ellos no se equivocaron al tocar esas canciones sin mí. Yo siento que me equivoqué al pensar que estaban mal”.
Waters se reunió con Gilmour, Mason y Wright para el concierto benéfico Live 8 del 2005, pero la gira conjunta que miles de seguidores esperaron ver, nunca se materializó.
Tristemente, Wright falleció en septiembre de 2008 luego de batallar contra el cáncer. En tanto, Gilmour hizo una aparición sorpresa en el 2011 para los conciertos de Waters en el O2 Arena de Londres.