Esta es la segunda y última parte de los posibles escenarios que podrían desarrollarse, luego de la terrible y futura pérdida física de la Reina Elizabeth II, quien permanece como un gran ícono de la corona británica ante el mundo.
Recordá que a sus 92 años de edad y con más de seis décadas en pleno poder, es la regente de mayor trayectoria; sin embargo, desde el Palacio de Buckingham ya se está estudiando lo que ocurrirá una vez no pueda continuar con sus obligaciones. Veamos.
Lealtad al Parlamento
El nuevo monarca deberá jurar lealtad al Parlamento en el Consejo, y se emitirá una Proclamación de acceso. También deberá rendir honor a la iglesia de Inglaterra. En respuesta, el Consejo hará una Proclamación de Adhesión que se leerá el Día de la Proclamación, después de la muerte de la Reina, en Londres, Edimburgo, Windsor, York y otras ciudades de su país.
Juramento de los políticos
Ambas cámaras del Parlamento se sentarán. Sus miembros tendrán la oportunidad de tomar un nuevo juramento de lealtad al heredero. También presentarán sus condolencias al nuevo soberano, en un formato no determinado.
El nuevo soberano podrá cambiar su nombre
El Príncipe Charles, que se toma como el sucesor de la Reina, podrá cambiar su nombre. No necesariamente se convertirá en el Rey Charles. Al ascender al trono, los miembros pueden elegir el nombre de su reinado, de cualquiera de sus nombres cristianos.
Si Charles desea cambiarlo, podrá ser conocido como el Rey Philip, o el Rey Arthur o quizás el Rey George, recordando que su nombre completo es Charles Philip Arthur George.
El cuerpo de la Reina
Mientras todas las acciones posteriores a la muerte de Elizabeth II se desarrollan, su cuerpo permanecerá en resguardo pero a la vista del público. Se mantendrá en Westminster Hall. Habrá una breve ceremonia para marcar la llegada del ataúd, y luego los ciudadanos podrán pasar y darle el último adios. La sala estará abierta casi una hora al día.
Vigilia de los Príncipes
El pasado 8 de abril del 2002, los príncipes Charles, Andrew y Edward rindieron honores a su desaparecida abuela la Reina Madre en Westminster Hall. Esto podría repetirse en el funeral de la reina Elizabeth II.
Al acto se le cataloga como la Vigilia de los Príncipes. Es una ceremonia formal, donde en aquella ocasión asistieron unas 200.000 personas. Con la Reina, la cifra se disparará un poco.
Planificación previa
La misma Reina ha participado activamente en todo lo referente a su funeral, según fuentes del Palacio de Buckingham. La monarca no lo considera un evento lúgubre, sino un paso inevitable de todo ser humano.
Su servicio será dirigido por Justin Welby, arzobispo de Canterbury, segunda figura más importante de la Iglesia de Inglaterra.
La coronación
Un año después de su partida, llegará la hora de coronar al heredero, habiéndose cumplido un período de duelo. Es un asunto ceremonial, aunque el nuevo monarca tiene la capacidad de hacerlo muy a su manera.
Suponiendo que el Príncipe Charles no desea romper con la tradición, se celebrará en la Abadía de Westminster y será oficiada por el Arzobispo de Canterbury.
Costo de la coronación
Ese evento costará miles de millones de libras. Será transmitido en televisión y se tomará como un día de fiesta en el país. Algo que no resulta tan divertido, es que habrá un costo directo para el contribuyente, mucho más que cuando Elizabeth subió al trono en los cincuenta.
Toda la información fue divulgada por un ex empleado del Palacio, que conversó directamente con Business Insider.