Céline Dion viene de superar el fallecimiento de su esposo en 2016, el año pasado a sus 49 años se desnudó para la revista Vogue y este año llega a su medio siglo de vida con una lucha por motivos de salud que lleva meses y que la obligó a cancelar los conciertos previstos para este mes. Y es que deberá ingresar al quirófano para someterse a una intervención como parte de una complicación en uno de sus oídos.
La famosa por interpretar la inmortal canción de Titanic, además de otros temas icónicos, fue diagnosticada con Trompa de Eustaquio Patulosa, un mal que impide la audición y que le dificulta cantar, por lo que tiene la atención de todos sus fanáticos quienes oran por su pronta recuperación a estos quebrantos de salud.
El anuncio de la cancelación de los conciertos, previstos en el Colosseum del Caesars Palace de Las Vegas, se dio hace pocos días a través de la página de Facebook de la artista.
Pese a este gris panorama su natal Quebec, la provincia canadiense donde nació, está de júbilo por este nuevo aniversario de su hija, convertida en uno de los máximos exponentes de la música, muy a pesar de todas las dudas generadas sobre su lanzamiento a la fama.
Un periodista cultural de Montreal, de nombre Nicolas Tittley, reseñó que Dion no siempre contó con el pleno respaldo de sus coterráneos, especialmente de los representantes de la élite cultural de Quebec, de donde surgieron críticas hacia la cantante de quien aseguraban tenía poca preparación intelectual, lo que comprometería -según ellos- la imagen de la provincia francófona canadiense.
Sin embargo, reseñó que Céline Dion logró callar muchas bocas al demostrar ser una quebequense que además de haber llegado lejos con reconocimientos a nivel mundial no ha olvidado sus orígenes y se ha hecho respetar.