Durante toda la historia las familias reales del mundo mantienen y se esmeran por llevar una vida personal alejada de los rumores, chismes y de la publicidad. Sin embargo, con el pasar de los años y quizás con la modernidad, estas cosas han cambiado o las reglas se han flexibilizado.
Tal es el caso de la princesa Eugenia de York, quien afronta una vida cotidiana llena de eventos, trabajos, relaciones sociales, etc. Y es que la cuarta nieta de la reina Isabel II recientemente creó una cuenta personal en la red social Instagram @princesseugenie, lo cual impresionó a los seguidores de la Corona.
Mientras que la duquesa de Sussex Meghan Markle, esposa del príncipe Enrique, fue obligada a cerrar su blog y redes sociales.
Este hecho representa un hito en avances monárquicos y sociales, ya que la novena en la línea de sucesión al trono británico es la primera en romper dicha barrera personal para dedicarse a seguir al resto de los mortales.
Ahora, la pregunta es ¿Por qué ella puede mantener este privilegio y Markle tuvo que cerrar sus cuentas?
La razón es simple y es porque Eugenia no es un miembro activo de la familia real. Es decir, ésta no realiza compromisos oficiales como sus primos Guillermo y Harry, aunque a menudo haga acto de presencia en numerosos eventos caritativos y de diversa índole, estos no están fijados en ninguna agenda oficial con su nombre.
De hecho, su hermana la princesa Beatriz también posee un usuario privado de Twitter conocido como @yorkiebea. Además su lugar de trabajo se centra fuera del palacio, concretamente en Hauser & Wirth, una galería de arte contemporáneo en Londres donde ha trabajado durante los últimos tres años.