El actor Colin Farrell no puede evitar ser un rebelde. Por ejemplo, en Dead Man Down (2013) interpretó a un gánster que buscaba a la pandilla que mató a su esposa e hija, ignorando todo el asunto de no rebajarse a ese nivel.
De alguna forma, siempre ha hecho el papel de chico malo: aquel atrapado en una cabina telefónica en Phone Booth (2003); el que pretendía conquistar al imperio persa en Alexander (2004); y ni hablar del atrevido vampiro en Noche de Susto (2011).
Lo curioso es que su ruda personalidad aparece casi siempre en escena ante los medios. En ocasiones se le vio como un chico fiestero, algo lujurioso y acompañado de hermosas mujeres de la farándula. ¿Querés saber cuáles han sido las más locas y traviesas aventuras de Farrell?.
Durante su época universitaria, Farrell pasó una noche en la cárcel por robar en varias tiendas; y mientras asistía al internado de Gormanston, empujó a un supervisor contra la pared y lo golpeó. Luego de eso fue expulsado.
En el 2005, la actriz Eileen Atkins, en ese entonces de 70 años, informó que Farrell le había pedido repetidamente sexo sin condiciones durante el rodaje de Ask the Dust.
En el 2001, Farrell se fugó con la actriz Amelia Warner y se casaron simbólicamente en Tahití. Cuatro meses después se separaron.
Antes de caminar juntos por la alfombra roja, en el estreno de The Recruit (2003), Colin se emborrachó con Britney Spears. Aparecieron abrazados y sonrientes ante las cámaras. Casi se perdió el lanzamiento de su propio film.
Sobre su amistad con Elizabeth Taylor, el actor le dijo a Access Hollywood: “¿Cómo nos hicimos amigos?. Ya sabes, la vieja historia del chico que se encuentra con la chica, y después el chico molesta a la chica con demasiadas llamadas telefónicas a horas inapropiadas”.
En una fiesta organizada por Val Kilmer, ya en la última semana del rodaje de Alexander, Farrell estaba tan borracho que apenas podía sostenerse. Insistió en hacer una danza irlandesa. Cuando saltó desde una mesa, aterrizó mal, rompiéndose el tobillo y la muñeca.
También mientras rodaban Alexander, Angelina Jolie se cansó de las travesuras de Farrell por el alcohol. Exigió que la sacaran del hotel donde Colin se hospedada, a otro más alejado para estar más tranquila con su hijo Maddox.
En el 2005, el irlandés acudió a los tribunales para solicitar que su ex novia la Playmate Nicole Narain no publicara en Internet un video sexual de ellos. Farrell ganó el caso e impidió que la cinta se filtrara al público.
Un año más tarde, la revista calculó que los hábitos de consumo de alcohol y drogas de Colin en dos semanas eran: “veinte píldoras de éxtasis, cuatro gramos de cocaína, tres botellas de Jack Daniels, doce botellas de vino, sesenta pintas de cerveza y 280 cigarrillos”.