Existen muchas noticias buenas de Pelé, sobre todo las que relatan su excelsa trayectoria como futbolista; sin embargo, hay un lado de él que no es muy conocido y que no le agrada a mucha gente. Incluso en Brasil ha sido señalado como traidor.
Se acercaba el Mundial de Fútbol de Brsail en 2014, las protestas en contra de la realización del Mundial se recrudecían y la foto de Pelé se asomaba entre uno de los carteles de las personas que manifestaba su oposición al evento deportivo.
Al parecer, Pelé ya no goza de la popularidad que tuvo durante mucho tiempo en su propio país, incluso más de 10 años atrás un compatriota y también gran futbolista brasileño Sócrates lo acusó de traidor.
A través del tiempo el mejor deportista del siglo XX ha sido criticado en su país por diversas actuaciones, asociaciones y apariciones en público con personajes de la política de ese país sudamericano.
Una de los casos más conocidos fue cuando en 2001, Sócrates se dirigió a Pelé como traidor por haber abrazado a Ricardo Teixeira, presidente de la Confederación de Fútbol Brasileña, quien había sido acusado de corrupción.
Otro caso que le costó a Pelé una problema mayor fue cuando criticó a Aranha, portero del Santos en septiembre de 2014, quien se quejó en contra del racismo en las canchas de su país.
El un acto con un patrocinador, Pelé le restaría importancia al hecho y dijo que en sus tiempos siempre recibió cualquier tipo de ofensas pero que hacían caso omiso a los improperios, con eso era suficiente.
Romario, quien es otro gran ídolo de Brasil, también lo criticó y soltó una frase muy dura: “Pelé callado, es un poeta”.
Un periodista también se sumó a la crítica. Alex Bellos quien contribuyó a escribir una autobiografía del astro brasileño dijo que Pelé en Brasil ya no están importante como en el mundo entero.
Además añadió que no debería ser tomado en cuenta como político o intelectual, pues simplemente es un futbolista.