Muchas son las películas donde la actriz estadounidense Nicole Kidman demuestra sus cualidades histriónicas. Cada una de las producciones significa un reto para la colorada de ojos azules, las cuales además le han dejado huellas imborrables.
Encarnar a la legendaria Grace Kelly en la película Grace of Mónaco en 2014 fue una experiencia inigualable para Kidman, quien asegura haber aprendido mucho.
Parte de este aprendizaje, según la propia actriz, fue el amor por la alta costura, a propósito de los majestosos trajes y joyas que formaban parte del vestuario que debía lucir en el filme y que hablaban de la elegancia de Kelly y de su buen gusto en el mundo de la moda.
“Su estilo es icónico, lo mismo que su belleza y su elegancia”, declaró Kidman al referirse a la ex princesa consorte de Mónaco.
Esta experiencia para Kidman fue extraordinaria, ya que se sintió afortunada por el papel y por darle vida a una figura de la talla internacional de la extinta Grace Kelly, tarea que significó una gran responsabilidad para la norteamericana.
Antes de ser reconocida por su matrimonio con el príncipe Raniero III, Grace Kelly fue toda una diva del cine e incluso fue galardonada con un premio Oscar a la mejor actriz por su interpretación en la película The Country Girl.
Kelly nació en Filadelfia, Estados Unidos, el 12 de noviembre de 1929 y murió en Mónaco el 14 de septiembre de 1982, tras un accidente automovilístico a los 53 años.
A la edad de 26 años, aunque era una actriz muy famosa, le dijo adiós al séptimo arte para casarse con el príncipe de Mónaco. De esta unión nacieron Carolina, Alberto y Estefanía.
La recuperación de la economía de Mónaco tuvo en Kelly una gran aliada, ya que el turismo y la economía dieron un salto después de su entrada al principado.
La princesa también se caracterizó por sus ayudas humanitarias. Llegó a ocupar la presidencia de la Cruz Roja, ayudó a muchos desvalidos, así como a mejorar el hospital y otras sedes importantes de Mónaco.
Aunque la película Grace of Monaco no recibió las mejores críticas, la actriz Nicole Kidman dijo sentirse cómoda con el personaje y según el público su actuación fue impecable.