Kalli West, de Lewiston (Idaho, EE.UU.), decidió gastar una broma a sus compañeros colocando un test de embarazo en el lavabo del trabajo.
Kalli abrió la caja que contenía el test como si hubiera sido usada y colocó el test a la vista de todos. Fue sólo cuestión de tiempo que sus colegas se interesaran por el inesperado objeto. La gente empezó a dejar notas junto a la prueba de embarazo, así que cada vez que Kalli volvía había un nuevo mensaje
Los carteles, de un ingenio impresionante, dejaban mensajes como "octubre parece un buen mes para ser madre" o "será un bebé de halloween". Otro incluso dijo: "Te sale más barato utilizar métodos anticonceptivos".
Después de que Kalli publicara la primera entrega, ésta ha reunido más de 11 millones de visitas en TikTok. Un usuario comentó: "¡Quiero totalmente probar esto en mi trabajo!".