Betty Ann Jones, de 79 años y natural de Ponterwade (Gales), se comprometió a deshacerse de toda su decoración navideña, en la que había invertido más de 30.000 libras, después de que su marido Keith se lo pidiera.
No obstante, la entrañable anciana decidió hacer caso omiso a su cónyuge, gastando otras 5.000 libras en la decoración navideña del presente año. De esta manera, Betty añadió a la colección otros 6 árboles navideños afirmando que se está quedando sin espacio para decorar.
Su marido, Keith, también de 79 años, odia la Navidad, pero eso no impide que Betty Ann se vuelque con la decoración, ya que incluso ha creado la gruta de Papá Noel en su jardín con un trineo de 2 metros.
Fuente EP.