Entrenar con pesas, correr, trotar o hacer cualquier otro tipo de ejercicios es una actividad básica que desempeñan muchas personas para estar en forma o por cuestiones de salud.
Las celebridades también aplican en su vida diaria esta rutina, sobre todo para cumplir con las exigencias del mundo del espectáculo, aón cuando muchas veces les dé pereza.
Si bien hay muchas formas de ejercitarse, siempre hay algunas preferidas por los actores. En el caso de Matt Damon, el Krav magá es su predilecto.
Se trata de una actividad intuitiva, de defensa personal, en la que se trabaja la fuerza, la flexibilidad, la resistencia y la coordinación. Esta técnica ayuda a fortalecer el cuerpo y quemar grasa, lo que sin duda le ha servido al actor para lucir en forma.
Damon también se ejercita cuando requiere darle vida a algún personaje. Para interpretar al ex convicto Max Da Costa en Elysium (2013) ameritó un cambio físico por exigencias de guion.
No solo se cortó el cabello hasta lucir la cabeza rapada, sino que además siguió las instrucciones de un nutricionista personalizado y por espacio de cuatro meses su alimentación se basó en carnes magras, verduras y claras de huevo, sin una gota de grasa.
Además, en la mañana corría varios kilómetros y completaba su formación física con fuertes entrenamientos en el gimnasio.
Aunque Damon reconoce que fue cuesta arriba motivarse para entrenar, asegura que interpretar a Max Da Costa valía la pena.
Pero este no ha sido el único cambio físico de Matt Damon por exigencias del guion. Para su papel en la película En honor a la verdad (1996), el actor se vio obligado a bajar 23 kilos; mientras que en 2009 la balanza subió y el estadounidense engordó 18 kilos para cumplir el rol de Mark Whitacre en el filme The Informant (El soplón).