A la actriz inglesa Elizabeth Hurley la maternidad le cambió la vida, por lo que durante el periodo de gestación y el primer año de su bebé se tomó un receso cinematográfico indefinido, para estar cerca de su hijo el mayor tiempo posible.
Elizabeth aseguró que deseaba vivir la etapa con la que siempre soñó. No quería perder detalle del desarrllo de su cuerpo, los cambios que en él ocurrían y sobre todo la llegada del bebé.
En ese momento le surgieron infinidad de dudas que debió aclarar con especialistas y con su familia, pues no sabía si eran normal o de cuidado.
"No le he dicho adiós al cine, pero a veces cuando hacés una película tenés que viajar muy lejos y así es muy difícil tener una vida de familia, no quiero estar lejos mientras mi hijo está pequeño", dijo la actriz durante una visita a la Ciudad de México.
Indicó que si bien mantendrá su profesión dentro de la gran pantalla, la verdad es que desea poner todo su empeño en los primeros años de vida de su primogénito. Luego retomará su pasión: el cine.
El nacimiento del primer hijo de la Hurley, Damian Charles, estuvo cargado de especulaciones sobre la paternidad del pequeño. Durante una entrevista, la intérprete confesó que vivió momentos muy duros al conocer la noticia de su embarazo.
"Fue una semana muy dura cuando me enteré de que estaba embarazada. Bing y yo rompimos. Dejé de fumar, tomar alcohol y café y pasó lo del 11 de septiembre. Mi mundo se desmoronó y después todo se vino abajo", añadió.
Sin embargo, luego de meses difíciles llenos de rumores y una vez que las pruebas de ADN demostraron que Steve Bing era el padre del niño, Hurley pudo disfrutar de la maternidad rodeada de buenos amigos como Elton John y Hugh Grant.
La actriz también señaló que Damian no fue un niño buscado, pero sin duda fue querido, y por otro lado se negó a hablar directamente de Steve Bing, indicando que no hablaría del padre de su hijo de otra forma que con respeto.