Hay una razón por la que personajes como Tyrion Lannister se convirtieron en favoritos de los espectadores: porque son divertidos y no tan complicados. Esa es una gran virtud en el mundo despiadado de George R. R. Martin.
Entre tanta violencia y desesperación, se abarcaron algunas simpáticas escenas que merecen ser recordadas. Sería como una bocanada de aire puro, mientras nos dirigimos al final de esta inigualable serie televisiva. Acá tenés lo más divertido de GOT:
El galanteo de Tormund
Tormund Giantsbane no es ajeno a los encuentros íntimos, pero su fascinación por Brienne of Tarth fue instantánea. Cuando la vio su mundo se paralizó, y eso hizo que actuara muy raro frente a la imponente rubia.
Sus tácticas de seducción no funcionaron, tal vez porque todo es diferente más allá del muro, ¿cierto? Al intentar romper el hielo con Brienne, le sonrió con picardía y eso seguramente la dejó sin saber qué hacer.
Culpabilidad de Tyrion
Tyrion Lannister fue injustamente acusado de empujar a Bran Stark desde la torre, donde por primera vez vimos la conexión real de los hermanos Cersei y Jaime. Eso hizo que lo juzgaran frente a Catelyn Stark, en la casa de su hermana Lysa Arryn, saliendo victorioso por el talento de Bronn en la lucha.
El momento cuando Tyrion trató de explicar que no era la persona que buscaban, fue uno de los diálogos más chistosos de la temporada. Todo un recordatorio de la simpatía de ese icónico personaje.
Clases con Bronn
La reputación del Matarreyes siempre precedió a Jaime, hasta que perdió la mano con la cual alzaba su espada. Así fue despojado de sus famosas habilidades de duelo. Cuando Tyrion organizó un curso con su ex campeón Bronn, Jaime no pudo soportarlo.
Al comienzo del entrenamiento, Bronn no ofreció misericordia ni tiempo para adaptarse. Después de arrinconarlo en una esquina, sacó la mano metálica de Jaime y lo tiró al suelo con ella. “¡¿Qué diablos fue eso ?!” preguntó Jaime. “Fui yo metiendo tu propia mano en tu trasero”, respondió Bronn.
Tyrion vs. El consejo
En los Siete Reinos, el poder puede ser definido por aquellos que tienen un asiento en la mesa real. Para Tyrion, esas oportunidades no siempre se garantizaron.
Cuando el Consejo se reunió en la temporada 3, antes de que Tywin designara a su hijo Master of Coin, Tyrion no encontraba asientos disponibles cerca de Lord Varys, Little Finger, Maester Aemon y su hermana, Cersei.
Pero eso no importó mucho. Tyrion tomó una silla grande y la arrastró hasta la cabecera de la mesa, rechinando alegremente en el camino. Se sentó frente a su padre y dijo: “Muy íntimo. Una preciosa mesa”. No se trataba del Trono de Hierro, pero Tyrion lo tomó con orgullo.
Brienne juzga a Jon
Además de ser una guerrera letal, Brienne of Tarth es muy astuta. Ella ve a través de las sutiles mentiras de Sansa Stark a Jon Snow, y no duda en llamarle fanfarrón. Aunque Sansa le asegura que su medio hermano tiene buenas intenciones y es confiable, Brienne se toma un momento para admitir que Jon tiene problemas.
Durante muchos años, los fanáticos de GOT se han burlado del retrato de Snow, como el siempre derrotado y malhumorado ex vigilante del muro. En un guiño a la opinión popular, Brienne comentó: “Es un poco melancólico. Supongo que es comprensible, teniendo en cuenta lo que ha pasado”. Fue un momento brillante que la misma Brienne, cuyos sentimientos no exterioriza, haya sentido empatía con Jon.
El Secreto de Podrick
Nada supera el regreso del ayudante Podrick de la casa de citas de Littlefinger. Devolviendo a Tyrion su monedero, Podrick afirmó que las tres damas en realidad rechazaron el pago por sus servicios. Tyrion y Bronn se asombraron, ya que ninguna mujer haría eso.
Sin embargo, como reveló Podrick, las mujeres recibieron el pago suficiente de forma inesperada. “Entonces, ¿qué estás diciendo?”, preguntó Bronn. “Las señoras lo disfrutaron tanto que te dieron su tiempo gratis?”. Podrick, tímido como siempre, confirmó su sospecha. En ese momento, Tyrion saltó de su silla, tomó unas copas de vino y declaró: "Vamos a necesitar detalles. Muchos detalles”