Podrá ser una superestrella del canto y la actuación, pero la norteamericana Jennifer Hudson seguía encontrando muchos estereotipos racistas en su camino que -de vez en cuando- la hirieron, según la versión reseñada en la página ABC News.
La artista recordó varias experiencias relacionadas al tema, cuando se trasladaba en avión, por ejemplo. “Intentaba buscar mi asiento en primera clase, pero me atendió uno de los auxiliares de vuelo y me dijo que yo debía estar en la parte posterior. Pensaba, ‘No amigo, gracias, está usted equivocado’”, manifestó.
Otro penoso escenario se produjo en su propia casa. “Es extraño, pero pasó que varias personas creían que mi casa era en realidad de mi chofer (que es de tez blanca). Quería mudar algo y necesitaba ayuda. Cuando esos ayudantes quisieron saber dónde ubicar los objetos, le consultaban a él; es decir, pensaban que era el dueño de la propiedad”, comunicó con asombro.
Intentó dirigirlos para que el trabajo se realizara, pero no prestaban atención más que a Charles (su chofer). “Esos chicos seguían diciéndole: ‘Entonces, ¿dónde querés que coloque esto?, hasta que les respondió: ‘Sabes, le estás consultando a la persona equivocada’. Él me señaló, y no era lo que esperaban escuchar, creo”.
Situaciones así podrían inmutar a otros, pero no a Jennifer que desafió cualquier probabilidad y se convirtió en una famosa y rentable artista/madre afroamericana, que vive en un lujoso vecindario norteño.
“Pasan muchas cosas extrañas respecto al racismo, yo decido enfrentarlo. Nunca me harán callar. Odio que esas cosas pasen, pero si es así, sólo sigues de pie. Prefiero que me vean como alguien que no teme defenderse", agregó la diva que cuenta con millones de fans en todo el mundo.
Asimismo, puntualizó: "Ocurre igual en situaciones de acoso y abuso. Tenemos el derecho y el deber de decir que nadie puede controlar a otros de esa forma, nunca más”.