Love Actually fue una de las películas románticas más memorables del actor británico Hugh Grant, aunque él haya dicho que su mercadeo le pareció “repugnante”.
Sin importar lo anterior, se tomó como el gran regreso de Hugh en el cine, y estamos seguros de que no sabés varios de los secretos escondidos de su producción. Acá te lo contamos.
- Kris Marshall (quien interpretó a Colin) devolvió su cheque de pago por la escena donde tres chicas estadounidenses lo desvistieron. Dijo que lo pasó tan bien, además de que repitieron la grabación 21 veces, que estaba dispuesto a actuar gratis.
- El lago en el que Lúcia Moniz y Colin Firth estaban “nadando”, en realidad tenía 46 centímetros de profundidad. Tuvieron que arrodillarse para hacer que el agua pareciera profunda.
- Ese lago también estaba plagado de mosquitos. Firth fue picado tantas veces en el codo que se le hinchó hasta alcanzar el tamaño de un tomate. Debió ser atendido por un médico.
- Hugh Grant realmente no quería hacer la escena de baile. El director Richard Curtis dijo que el actor sintió que la escena chocaba con su papel como Primer Ministro. “Hugh estaba renuente. Seguía aplazándolo, y además no le gustó la canción. Originalmente era un tema de los Jackson 5, que no pudimos conseguir”.
- Billy Bob Thornton sentía un miedo irracional a los muebles antiguos. A veces, Grant mostraba un mueble antiguo a Thornton antes de que las cámaras rodaran, y lo miraba atónito.
- Emma Thompson vistió un traje para aparentar gordura. Era más delgada que el personaje que Curtis había imaginado.
- Thomas Sangster siempre actúa como un niño de 13 años. Tenía esa edad cuando interpretó a Sam en la película, y una década más tarde actuó como Jojen Reed en Game of Thrones, que según tenía 13, cuando en realidad ya Thomas estaba en sus veinte.
- La palabra Actually fue pronunciada veintidós veces por varios personajes en la película.
- Andrew Lincoln escribió los carteles él mismo, en la escena donde su personaje le dice a Keira Knightley que la ama. Lincoln comentó a Entertainment Weekly que consideraba que sus escritos eran buenos, así que le preguntó al equipo de arte si podía usarlos.
- Producción tuvo una reunión de cuarenta y cinco minutos para determinar qué color de la ropa interior usaría Aurelia en la escena del lago. Optaron por un azul pálido.
- Cuando Curtis estaba en la universidad, su novia lo dejó por un hombre llamado Bernard. En cada uno de sus guiones, hay un personaje con ese nombre. En este caso, el supuesto hijo de Emma Thompson y Alan Rickman.
- Para su cameo de un minuto, la modelo Claudia Schiffer recibió 200,000 dólares, es decir, casi $3,333 por segundo.