Para nadie es un secreto que la estrella a quien más admira Lea Michele, ex integrante de la serie Glee, sea la leyenda del cine y la canción Barbra Streisand.
Esto lo demostró en las presentaciones musicales que hizo el reparto de Glee por todo Estados Unidos, donde Lea aprovechaba para rendir tributo a la eterna Funny Girl, cantando sus emblemáticas canciones.
Cuando por fin la morocha tuvo la oportunidad de ver a su heroína cara a cara, fue el momento más importante de toda su carrera en la industria, al menos así lo reflejó en su libro Brunette Ambition.
“En enero de 2011 canté frente a Barbra en una ceremonia previa a los Grammys, para honrar su paso en Hollywood. Interpreté My Man de Funny Girl y me sentí muy nerviosa, pero increíblemente honrada de estar en ese escenario. Otros que interpretaron sus temas fueron Faith Hill, Seal y Stevie Wonder”, escribió Lea.
Continuó diciendo que esa noche quiso hablar con ella, pero justo al acercarse vio como el equipo de producción la sacó del lugar, y con ello se desvanecieron las esperanzas de conocerla.
“Fui a los Grammys porque presenté un premio, y Barbra cantó cuatro canciones. Fue la primera vez que escuché Evergreen en vivo. Dejé el evento temprano, cuando de pronto sentí que alguien tocó mi hombro y era ella. Me dio un abrazo y le dije que era una mujer increíble. Me preguntó si había sonado bien y le respondí: ‘Fuiste un sueño’. Cuando se alejó de mí, empecé a llorar”, recordó Lea.
Destacó que a veces uno tiene una imagen inalcanzable de sus héroes de la infancia, pero con Barbra fue tal y como lo imaginó. Confesó que luego del encuentro, llamó al productor de Glee, Ryan Murphy, y le contó que la había conocido y que ya no tenía razones para seguir en el negocio, porque “sus sueños se habían hecho realidad”.