El próximo 31 de agosto se cumplirán 21 años de la muerte de Diana de Gales, y pese al tiempo transcurrido su recuerdo permanece intacto en muchos corazones.
La otrora princesa de Cambridge y ex esposa del príncipe Carlos mantiene su popularidad a nivel mundial, a pesar de que ya no está físicamente, y su partida sigue causando nostalgia entre quienes la conocieron y admiraron.
Diana murió durante un accidente de tránsito ocurrido en el Túnel del Alma en París, capital de Francia. En la colisión murieron además su pareja Dodi Al-Fayed y Henry Paul, quien conducía el vehículo, mientras que el guardaespaldas de Al-Fayed, Trevor Rees-Jones sobrevivió, pues era el único que tenía colocado el cinturón de seguridad.
La tesis que cobra más fuerza en torno a este accidente es que el chofer conducía el auto Mercedes Benz a alta velocidad, para escapar de los paparazzis que acosaban a la pareja y querían fotografiarla.
Esta versión echó por tierra los señalamientos y las investigaciones que adelantó el padre de Dodi, Mohamed Al-Fayed, quien nunca descartó que la familia real británica y el servicio secreto de este país (M16) hayan conspirado para que este hecho ocurriera.
El bombero Xavier Gourmelon estuvo en el lugar del accidente auxiliando a las víctimas. Nunca imaginó que aquella mujer que estaba aprisionada en un amasijo de hierro era la princesa Diana.
Recuerda que estaba sentada en el suelo del coche y sus pies en el asiento. Logró visualizarle una lesión leve en el hombro, pero jamás pensó que estaba grave, por el contrario, la veía bien.
Gourmelon sacó a Diana del auto para que la llevaran hasta un centro de salud y le brindaran atención especializada. En el momento del rescate, Gourmelon recuerda que Lady Di lo miró y le dijo: “Dios mío, ¿qué ha pasado?”.
Luego de aquellas palabras, a la princesa le vino un paro cardíaco, por lo que le hicieron una reanimación cardiopulmonar y volvió a respirar, siendo luego trasladada en una ambulancia hasta el hospital Pitié-Salpêtrière.
En el trayecto hasta centro de salud, que se tardó más de lo normal tratando de evitar movimientos bruscos que afectaran la salud de la paciente, Lady Di sufrió un coma, producto de una hemorragia interna grave y un traumatismo craneal. La princesa más nunca despertó, murió en el quirófano.
El doctor Fréderic Mailliez también tuvo contacto con Lady Di en el momento del accidente. Mientras el profesional la atendía, Lady Di llegó a decir: "Ay Dios mío, me duele tanto, no puedo aguantar el dolor".
Desde el fallecimiento de Diana, el Túnel del Alma es sitio de congregación. Muchas personas acuden a diario al lugar como muestra de la admiración que sienten por la princesa.
Mientras que en la conocida llama de la libertad, réplica de la antorcha de la Estatua de la Libertad de Nueva York, ubicada adyacente a este viaducto, le dejan cartas, carteles, flores y fotos para rendirle tributo.