David Copperfield es un reconocido mago e ilusionista conocido a nivel mundial, por ser el autor de grandes trucos que han impresionado al público por su técnica impecable e increíbles habilidades.
Entre sus principales obras, el mundo pudo ver como hizo desaparecer la Estatua de la Libertad en 1983 y también como ha hecho lo inimaginable, al hacer desaparecer de la vista a un gran número de personas.
Pero ya el secreto se ha revelado, debido a que en el año 2013 uno de los trece participantes de su show en el Hotel MGM colocó una demanda a Copperfield, por haber sufrido grandes daños durante el desarrollo del truco. La mala suerte fue que en el momento de la ejecución Gavin Cox, quien es un chef inglés, fue elegido para ser uno de los desaparecidos.
Cuando colocaron a los 13 miembros del público en el escenario, los sentaron en una estructura de metal y los levantaron del suelo. En ese momento, alumbraron las cortinas con las que estaban cubiertos con linternas y los condujeron por un pasadizo secreto para sacarlos del teatro.
Cox alegó que la producción del show apuró tanto a los participantes para comenzar a correr, que cayó al suelo. Dicho incidente le costó una grave lesión en el hombro, que ha tenido que ser operada en varias ocasiones. Por otro lado, declaró que esto le ha causado una lesión en el cerebro, provocándole una condición parecida al Parkinson.
A pesar de todo, es innegable el talento de Copperfield como ilusionista, ya que ha realizado actos nunca antes visto y que quizás jamás puedan ser igualados. El lamentable hecho dejó una mancha en el historial perfecto de actuaciones del mago, pero no por ello la magia se ha ido.