Cate Blanchett es de las pocas actrices que tienen en su haber los cuatro premios más importantes del cine: dos Oscar, tres Globos de Oro, tres BAFTA, y tres premios del Sindicato de Actores de Cine.
Es una estrella de la actuación, tanto en teatro como en la pantalla gigante. A continuación, se develan algunos detalles de su vida:
Blanchett ha interpretado varios personajes masculinos
En 2007 Todd Haynes le pidió que personificara a Bob Dylan en la película I’m not there (2007). Le pareció tan descabellada y osada la idea que terminó aceptando. Significó un reto que la mantuvo nerviosa antes del rodaje.
No fue fácil encarnar a un hombre y declaró que usó un par de calcetines en la entrepierna para sentirse más masculina.
No participa en redes sociales
Solo usa correo electrónico y no tiene cuentas en Twitter, Facebook ni Instagram. Asimismo, disfruta en su tiempo libre de leer libros que le regalan o le recomiendan personas que admira.
Adoptó a una niña
Cate Blanchett y su marido, el dramaturgo Andrew Upton, tenían tres hijos biológicos y decidieron adoptar una niña. Iniciaron los trámites en Estados Unidos y en febrero de 2015 Edith Vivian llegó a sus vidas para integrarse a la prole familiar.
Cate ha declarado que su hija adoptiva ha sido un absoluto regalo y que están locos de amor por ella. De hecho, la actriz y su esposo se tomaron un año sabático para estar en familia, junto a sus cuatro hijos.
Su proyecto era dedicarse al teatro, no al cine
Su meta al egresar de la escuela de actuación era lograr una trayectoria profesional en las tablas. Alude que el teatro la ha convertido en actriz.
En una época, Blanchett dejó a un lado la pantalla gigante y se fue a Australia para dirigir la Compañía Nacional de Teatro. Volvió al cine cuando tenía más de 40 años y Woody Allen la llamó para que protagonizara Blue Jasmine (2013), película que le valió para ganar su segundo Oscar.
No tiene un estilo definido de vestuario
Le encanta pasar el día en pijama mientras está en casa con su familia. Confiesa que cuando requiere arreglarse para una aparición especial, luce radiante gracias a que cuenta con un equipo de personas que preparan su cabello, maquillaje y traje.