La serie The X-Files, también conocida como Expediente X o Código X, resultó un éxito de audiencia desde sus comienzos en el año 1993 y si bien su popularidad fue teniendo algunos traspiés, sigue considerándose como una de las producciones de ciencia ficción más premiadas de la historia.
Cada capítulo del programa era un desafío para sus productores, quienes siempre se mostraban complacidos con la respuesta del público.
Pero el 26 de enero de 1997 esa respuesta fue más contundente, una vez que el programa tuvo una audiencia de 29,7 millones de personas en Estados Unidos.
Ese día se transmitió el episodio número 12 de la cuarta temporada, titulado Leonard Betts. El papel de Betts fue interpretado por el actor estadounidense Paul McCrane, quien representó a un paramédico que es decapitado luego de que la ambulancia donde viajaba se estrellara contra un camión.
El cadáver de Betts es ingresado a la morgue; sin embargo, de forma inesperada el cuerpo sin cabeza abandona la cava fría, somete a quien cuida el lugar, lo despoja de su ropa, se viste y huye del lugar.
A partir de ese momento comienzan a suceder una serie de hechos misteriosos, que incluyen que a Betts le crece nuevamente la cabeza.
En este episodio además se revela que Dana Scully (Gillian Anderson), uno de los personajes principales de la trama, tiene cáncer, lo que confirma ella misma cuando se despierta en su domicilio con una hemorragia nasal.
Estos incidentes de la trama se unieron al hecho de que el capítulo se transmitió justo después del Super Bowl, principal campeonato profesional de fútbol americano en los Estados Unidos.
Pero The X-Files también tuvo que enfrentar un duro golpe. Y es que después de tanta popularidad, el último capítulo de la novena temporada fue el menos visto de todos los tiempos en una serie.
Se trasmitió el 19 de mayo de 2002 y fue visto por sólo 13 millones de espectadores. Cabe destacar que la serie The X-Files lleva ocho temporadas y la última salió al aire el 3 de enero de 2018.