Burt Reynolds se mantuvo en el juego de la actuación con proyectos como Deliverance (1972), The Longest Yard (1974), Smokey and The Bandit (1977), Boogie Nights (1997), y la lista sigue.
Su muerte a sus 82 años, producto de un paro cardiopulmonar, es difícil de comprender para quienes tuvieron el honor no sólo de conocerlo en vida, sino de trabajar a su lado.
Erik Kritzer, su agente de muchos años, dio la terrible noticia el día de ayer, pues Reynolds se encontraba internado en el Medical Center de Florida.
Sus fanáticos recuerdan su personalidad frívola, afable y muy juguetona…una rara combinación. Pocas veces fue aceptado por la crítica o la prensa, porque intentó hacer su voluntad y eso funcionaba en contadas ocasiones.
Reynolds recibió una nominación al Oscar cuando interpretaba al director porno Jack Horner en Boogie Nights; sin embargo, la primera vez que se vio a sí mismo en ese filme, estaba tan descontento que despidió a su agente.
“No me abrí a nuevos escritores, ni a partes arriesgadas porque no estaba interesado en desafiarme como actor. Me interesaba pasarlo bien. Como resultado, perdí muchas oportunidades de demostrar que podía interpretar papeles serios. Cuando desperté y traté de hacerlo bien, nadie me dio una oportunidad”, recordó Burt en su libro de memorias Basta de mí (2015).
Fue la estrella más taquillera de Hollywood cada año, desde 1978 hasta 1982, igualando lo visto desde los días de Bing Crosby en los cuarenta. Tan sólo en 1978, consiguió tener cuatro películas en los cines al mismo tiempo.
Algunas de sus peores decisiones fueron rechazar los papeles de Han Solo en Star Wars; el del astronauta retirado Garrett Breedlove en Terms of Endearment (por el cual Jack Nicholson ganó un Oscar como actor de reparto en 1984); y el de John McClane en Die Hard.
“Si tuviera que poner uno de mis filmes en una cápsula del tiempo, sería Deliverance. No sé si es la mejor actuación que he hecho, pero es la mejor película en la que he participado. Demostró que podía actuar, no sólo para el público sino para mí”, plasmó en sus memorias.
Sobre su vida amorosa, se supo de su unión con las actrices Sally Field, Dinah Shore, Inger Stevens y Farrah Fawcett. Reynolds estuvo casado con la actriz británica Judy Carne de 1963 a 1966, y luego con Loni Anderson de 1988 a 1993. Ambos matrimonios fueron tempestuosos, y su divorcio con Anderson fue publicitado.
“Mi vida estuvo llena de altibajos, siempre quise experimentar todo. Hasta ahora, estuvo muy bien. Sé que soy viejo, pero me siento tan joven. Sólo hay una cosa que no podrán quitarme: Nadie se divirtió más que yo”, señaló en su libro la siempre querida y quisquillosa estrella internacional.