Baloncesto, fútbol o golf son tan solo algunos de los deportes que practica el expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien siempre se ha destacado por su carisma y sus hobbies que no son tan comunes para los hombres que ostentan uno de los cargos más poderosos del mundo.
Incluso se dice que su interés en el fútbol se extiende a una conexión económica con West Ham United, aunque se ha revelado que se basó en nada más que una visita hace algunos años.
Barack Obama es partidario de los Medias Blancas de Chicago. En 2009 lanzó la pelota ceremonial en el juego de estrellas con una chaqueta White Sox.
También es fanático del fútbol de Chicago Bears. En su infancia era un fanático de los Pittsburgh Steelers y en 2011 invitó a los Chicago Bears de 1985 a la Casa Blanca.
El expresidente norteamericano también es hincha del baloncesto. De vez en cuando jugaba, incluso durante su apretada agenda como presidente de EE UU, y se sabe que fue el número 23 del equipo en su escuela secundaria.
Barack juega golf en Mid-Pacific County Club en Kailua, Hawaii, y ha jugado allí junto a Tiger Woods. En tanto, ha declarado que no es un gran admirador de la televisión, le encanta hacer chili y lo prepara con su propia receta familiar.
Tras dejar la presidencia, se le vio practicando su deporte favorito, el kitesurf, el cual aprendió a practicar con el magnate de la industria Richard Brason, propietario de Virgin. Las imágenes fueron muy comentadas en Internet, y mostraban un Obama relajado, divertido y en plena forma mientras practicaba con Branson.
Durante su mandato, Obama “no pudo surfear ni disfrutar de otros deportes acuáticos ni hacer muchas de las cosas que le gustan”, relató Branson en su blog. “Por eso fue fantástico darle la oportunidad de aprender a hacer ‘kitesurf’”, un deporte muy de moda en la última década”, finalizó.