Álex Pina, creador de la serie dramática del momento La Casa de Papel, dio su opinión de lo que fue desarrollar un show sin precedentes, que no sólo causó furor en España, sino que junto a Netflix generó un éxito a nivel mundial. Prueba de ello fue el repunte de la popularidad de sus actores, que ahora son trendy en las redes sociales.
“Para Vancouver Media fue una serie arriesgada. Fue un reto aportar algo nuevo a la ficción española. La confianza de Atresmedia con el show fue fundamental. Apostó por algo que no sabíamos cómo iba a salir. Nunca me había enfrentado a una serie de esa envergadura”, reveló Pina para Audiovisual451, quien ya había participado en series como Periodistas, Los Serrano y El Barco.
Añadió que se sentía complacido de presenciar un momento, en el que se están derribando fuertes muros dentro de la ficción española, para darle cabida a historias diferentes, de riesgo y con gran atractivo público.
“Creo que gracias a Atresmedia la ficción española ya es internacional. Llega a mayor público. Cuando la ideamos no dijimos ‘sí, es una serie para el mercado extranjero’, pero la productora nos comentó que este tipo de historias, con vibras como Ocean’s Eleven y Reservoir Dogs viaja muy bien”, dijo el creador.
Algunas de las hazañas que realizó junto a producción, para hacer La Casa de Papel, fue imprimir cantidades enormes de “dinero” en papel periódico. Para ello, se apoyó del medio español, ABC.
“Tuvimos que imprimir dinero, fabricar réplicas de las máquinas que emiten los billetes, levantar un decorado enorme que simulara un museo, y localizar la casa de campo donde planear el golpe maestro. Sólo el primer capítulo tiene 87 secuencias. Sé de películas que no llegan a ese número”, destacó Álex a la prensa.
Respecto a cómo fue el ritmo diario para cumplir cada episodio del programa, indicó que trabajó con dos equipos de cámara en simultáneo, que resultó en un planteamiento de grabación con calidad primetime.
“Hicimos sesiones de montaje, incluso durante los fines de semana. Presentamos factura cinematográfica con un equipo de profesionales que trabajaron en cine. Las expectativas fueron muy altas, y al final el resultado en la pantalla fue muy bueno”, finalizó Pina.