Alejandro Sanz, nombre artístico de Alejandro Sánchez Pizarro, alcanzó el estrellato internacional a fines del siglo XX y se mantuvo popular en el siglo XXI con su popular influencia flamenca en la música.
Sanz se crió en Cádiz, una ciudad en la región de Andalucía de España. Su padre era un guitarrista profesional que había trabajado con artistas como Manolo Escobar y Lola Flores.
Alejandro tomó la guitarra cuando tenía siete años y comenzó a componer canciones unos años después. Dejó la escuela de comercio a los 16 años para dedicarse a la música como carrera y grabó su primer trabajo en solitario, Los chulos son pa 'cuidarlos (1989).
El verdadero estatus de estrella pop llegó en 1991 con el lanzamiento de su primer álbum, Viviendo deprisa, y continuó con Si tú me miras (1993) y 3 (1995).
Su siguiente álbum Más (1997) mostró una madurez en el contenido lírico y la sensibilidad que atraía a un público más amplio. Mientras que el álbum Básico, que había sido lanzado previamente en una edición limitada e incluía canciones seleccionadas de sus álbumes anteriores, siguió un año después.
El muy esperado álbum El alma al aire (2000) fue tremendamente exitoso, ganó los Latin Grammy Awards en 2001 por el mejor álbum, la mejor canción, el mejor álbum vocal masculino y el mejor disco del año.
La popularidad de Sanz en el mundo de la música latina se reafirmó con el lanzamiento de MTV Unplugged (2001), que nuevamente obtuvo múltiples premios Grammy Latinos.
Sanz se aventuró a un nuevo terreno estilístico en sus últimos álbumes, colaborando con una serie de artistas internacionales, incluidos los vocalistas colombianos Shakira y Juanes, entre otros en El Tren de Los Momentos (2006).
A pesar de que conscientemente permitió que su estilo evolucionara, Sanz siguió siendo un especialista en baladas y canciones de amor infundidas de flamenco, que interpretó con una voz grave y distintiva.
Las canciones constituyeron la mayor parte de su octavo lanzamiento de estudio, Paraíso Express (2009). Ganó el Grammy al mejor álbum pop latino en 2011 y generó el crossover Looking for Paradise, un dúo con la cantante estadounidense de rhythm-blues Alicia Keys.
Sanz volvió a su estilo anterior para La Música No Se Toca (2012), que encabezó las listas de éxitos en España y México. Sin embargo, en Sirope (2015) incorporó una mezcla ecléctica de estilos, incluyendo funk, cumbia, soul y reggae, y la grabación ganó el Latin Grammy al mejor álbum de pop vocal contemporáneo.