Son pocos los artistas que pueden darse el lujo que se dio Federico Salles (35) de haberse formado y trabajado con los mejores, como con Julio Bocca, Julio Chávez, Norma Aleandro o Guillermo Francella, por citar algunos. "Trabajé con gente que admiré de toda la vida", reconoce. De perfil bajo, personifica a Gabriel Morel en ATAV, rol que define como un “villano machirulo de los de antes, con plata y poder, y deseo de más plata y poder”.
Hijo de dos arquitectos, arrancó a los 9 años estudiando comedia musical en el teatro El Círculo que administraba su abuelo materno, Hugo Gribodo, en su Rosario natal. Allí se formó, hasta que en 2000 se mudó a Buenos Aires. En Capital terminó los dos últimos años de la secundaria y continuó sus estudios de teatro y canto, hasta conseguir una beca de cuatro años en la Fundación Julio Bocca. Años más tarde sería becado por Julio Chávez.
"La tele tiene eso de que llegás a un público mayor, tiene una llegada mucho más inmediata. La gente no tiene que ir al teatro para conocer tu trabajo. Estoy feliz de hacer a Gabriel Morel en una tira diaria tan cuidada como ATAV".
“Mi primer trabajo en Buenos Aires fue a los 14 años con Nine, una puesta de Londres. Pero nos instalamos acá con mi mamá recién a mis 16, porque mi hermana Candela (33) había quedado en el elenco de Chiquititas como Olivia, la malvada hija de Patricia Sosa”, cuenta en el comienzo de una entrevista íntima con Ciudad. “Ya en televisión, debuté en 2011 en Polka con el personaje de Cátulo, el loquito del pueblo en Herederos de una Venganza. Aunque mi primer protagónico en teatro fue en 2010 en Despertar de Primavera, con la producción de Cris Morena, junto a Fernando Dente y Florencia Otero. Después, en 2016, estuve en Franciscus, donde hice a San Francisco de Asis, con producción de Flavio Mendoza y dirección de Norma Aleandro. En cine debuté en Animal, de Armando Bo y protagonizada por Guillermo Francella”.
-Tenés una carrera impresionante, pero es gracias a ATAV que te hiciste más popular. ¿Cómo tomás esa repentina fama?
-La tele tiene eso de que llegás a un público mayor, tiene una llegada mucho más inmediata. La gente no tiene que ir al teatro para conocer tu trabajo. Estoy feliz de hacer este personaje en una tira diaria tan cuidada. No es común ver una tira de época con todo lo que implica, pero veo que repercute en la gente, están muy enganchados con la novela, el personaje y todo, quieren saber qué va a pasar. Eso me abre más posibilidades.
"Tu parte del Trato tuvo un final muy sugestivo y deja abierta la posibilidad a una segunda venganza, a otro trato. No sé si se hará una segunda temporada pero estoy expectante y deseoso de que pase porque me parece que el unitario está buenísimo".
-También tenés un rol clave en Tu parte del trato.
-Sí, no quiero adelantar mucho para los que no lo vieron entero por Flow. Grabé una participación en el unitario de Polka, con Nicolás Cabré, Eleonora Wexler y Jazmín Stuart. Estuvo buenísima. Tuvo un final muy sugestivo y deja abierta la posibilidad a una segunda venganza, a otro trato. No sé si se hará una segunda temporada, pero estoy expectante y deseoso de que pase porque me parece que el unitario está buenísimo. Creo que está re bien logrado desde las actuaciones, la dirección, la fotografía, y el guión.
-Dada tu formación artística tan ecléctica, ¿qué es lo que más te gusta hacer sobre los escenarios?
-Siempre traté de estudiar las tres áreas, baile, canto y actuación, y de formarme de forma independiente en cada una. Siempre quise formarme como actor, cantante y bailarín. Al principio trabajé más de cantante y bailarín porque son la puerta de entrada al musical. Pero eso fue creciendo para tener distintos trabajos. Por ejemplo, cuando hice El Maestro, el unitario de Polka con Julio Chávez e Inés Estévez, saber de todo me vino bien porque era el asistente de Julio en danza clásica. Me sirvió todo mi bagaje para contar la historia. Quiero estar entrenado y preparado para lo que salga. En Franciscus eran dos horas sobre el escenario, con un ejercicio físico muy fuerte, escenas desgastantes que necesitan preparación para sostenerlo de miércoles a domingo.
"Cuando arranqué a los 9 años en Rosario no me imaginaba mucho cómo sería mi vida, o de qué manera se iba a desarrollar mi carrera, qué era lo que iba a tener que hacer para vivir de lo que me gusta. Pero siempre tuve fe".
-¿Cómo viene tu 2020?
-La verdad es que no sé bien cómo vendrá el año que viene. Me gustaría seguir en la tele, ligado a lo audiovisual, pero estoy abierto a lo que surja en teatro porque me encanta.
-¿De chico confiabas en que ibas a poder vivir de tu vocación artística?
-Siempre es un poco contra todo pronóstico. Cuando arranqué a los 9 años en Rosario no me imaginaba mucho cómo sería mi vida, o de qué manera se iba a desarrollar mi carrera, qué era lo que iba a tener que hacer para vivir de lo que me gusta. Pero siempre tuve fe. Tengo una sola vida y me la jugué. Muchos familiares me dijeron que por las dudas estudie otra cosa, pero me dediqué de lleno a estudiar todo lo que pude para tener las más amplias posibilidades. Y era o quedarme con la duda o hacerlo.
-¿Y tuviste un plan alternativo como te sugerían?
-No, nunca fue un plan B por si no la pegaba como actor, sino que eran más medios para pagar los estudios, siempre para poder desarrollarme como artista y vivir de mi trabajo como ahora.
"Vivo en pareja hace cuatro años con Pablo. Es fotógrafo y tiene mi misma edad".
-¿Cómo es tu vida personal?
-Vivo en pareja hace cuatro años con Pablo.
-¿Cómo se conocieron?
-Nos conocimos hace un poco más de cinco años por un trabajo, amigos en común. De ahí salió el contacto.
-¿A qué se dedica Pablo?
-Tiene mi misma edad y es fotógrafo.
-¿Planean casarse o ser padres?
-No, la verdad es que no pensamos mucho en eso. Dejamos que las cosas pasen de a poco, naturalmente. Por ahora estamos muy bien así. Es una decisión compartida.
-Se te ve súper delgado. ¿Siempre fuiste así o es parte del fisic du rol de época para ATAV?
-Siempre fui flaquito, aunque es cierto que me corté el pelo y me dejé el bigote para hacer a Gabriel Morel. Uno va variando dependiendo de la exigencia y la necesidad del personaje. Para actuar en Animal me convenía engordar y estaba muy distinto. Tengo la tendencia a la delgadez, hice mucho baile desde chico y también es genético. En un momento me costaba mucho engordar, pero eso ya pasó.
"Si bien de chico me costaba engordar, no era un tema de salud sino algo estético. En una época comía mucho más y disfrutaba del beneficio de comer todo lo que quería sin parar".
-¿Cómo fue esa época?
-Si bien de chico me costaba engordar, no era un tema de salud sino algo estético. Como dije, es más bien algo de genética. No tenía problemas de salud, sino que me costaba engordar lo que a otros no. En una época comía mucho más y disfrutaba del beneficio de comer todo lo que quería sin parar. El tema de la dificultad para engordar era un tema que estuvo en mi mente, pero fue algo sobre lo que tomar medidas con médicos. Se resolvió con el tiempo.
-¿Cómo tomaron Pablo y tu familia tu aclaración a Mirtha Legrand en su programa de que tenías "novio" y no "novia"?
-Fue una anécdota nada más. Llamó la atención porque no todos los días uno va a la mesa de Mirtha y se habla de sexualidad. Lo tomamos con humor, como algo que pasó. Pero no fue grave. Al contrario, recibí muchos mensajes de amigos a los que les causó gracia. Por suerte tuve buena onda de todos.
-¿Qué hacés en tus ratos libres?
-Mantengo mis clases de canto, porque la voz es un músculo y necesita un entrenamiento. Obvio que lo disfruto. Además, sigo con la terapia que arranqué en 2010. A veces voy al gimnasio. Hago lo que hace todo el mundo. Me gusta estar con mi familia, leer, salir con amigos, ver películas. Trato de sacarle el mejor provecho posible al tiempo que me queda cuando no trabajo.
-¿Cómo te manejás con las redes sociales?
-Hay algunas que uso más que otras, como Instagram por una cuestión de trabajo, porque es una vidriera para mostrar lo que hago. Aunque también lo disfruto porque es una herramienta de conexión familiar, porque no tengo tanta cercanía física.
Fotos: Musepic
Producción: Aldana Moreno Lusianzoff https://www.instagram.com/helloaldana/
Asistencia: Martín Chalap https://www.instagram.com/stories/martuchalap/
Maquilló y peinó: Kelly Silva https://www.instagram.com/cielo_ude_19
Vestuario: Bolivia / IG: @boliviaonline / Dinamarca / IG: @dinamarcaok