La imagen inalcanzable de la diva rodeada de asistentes, peinadores, maquilladores y toda la parafernalia típica de las estrellas no va con Shakira (38). La diosa colombiana deja el glamour para los shows y los eventos top. En su vida cotidiana, la imagen de la cantante de Barranquilla dista mucho de la figura glamorosa que promocionan las marcas de belleza.
Shakira fue al jardín con un look de entrecasa, lejos de la figura inalcanzable de estrella internacional.
Híper relajada, la bella colombiana cultivó un look de entrecasa para ir a buscar al jardín a su hijo mayor, Milan (2), en Barcelona. Sin nada ¡pero nada! de maquillaje, Shakira se acercó hasta la puerta de la escuela luciendo jogging, zapatillas, remerón, campera y su voluminosa cabellera al viento. Como cualquier otra mamá, la artista (que posee una fortuna de 140 millones de dólares, según la revista especializada Forbes) se calzó la mochilita de su hijo al hombre y luchó contra los fuertes vientos de la primavera española.
A casi dos meses de haber dado a luz al pequeño Sasha, su segundo hijo con el defensor del Barcelona Gerard Piqué (28), Shakira no le tuvo miedo a los paparazzi, y se mostró plena y feliz post embarazo.
Una belleza verdadera, sin Photoshop y lejos de los divismos.