Desde que Linday Lohan (30) se convirtió en una estrella infantil de Disney los escándalos poblaron su vida a medida que fue creciendo. Sin embargo, la actriz habría dado un vuelco radical a su vida y se habría convertido al Islam. Desde 2015 Lindsay venía dando señales de su acercamiento a esta religión y la decisión de borrar todas sus fotos de Instagram respondería a este cambio.
"Soy una persona muy espiritual y estoy abierta a aprender. Estados Unidos ha pintado el Corán de una forma muy distinta a cómo es de verdad. Todos creemos en algo y al final todo nos lleva a un Dios".
Los medios internacionales se sorprendieron al descubrir que las imágenes de la red social de la actriz, muchas de ellas en bikini y realizando actividades que el Islam condena, habían sido eliminadas junto a un llamativo mensaje en su biografía: "Alaikum salam" que significa "la paz esté contigo" y es el tradicional saludo árabe.
No es la primera señal que da la figura. En mayo de 2015 Lindsay fue fotografiada en las calles de Nueva York, mientras llevaba bajo el brazo el Corán y en una entrevista que dio al diario The Sun no descartó en convertirse en musulmana: "Soy una persona muy espiritual y estoy abierta a aprender. Estados Unidos ha pintado el Corán de una forma muy distinta a cómo es de verdad. Todos creemos en algo y al final todo nos lleva a un Dios o a un consejero espiritual. Todos tenemos una creencia similar en lo personal", expresó en una entrevista con el diario británico The Sun.
"En Estados Unidos me crucificaron. Me hicieron ver como si fuera Satanás. Yo era una mala persona por llevar el Corán. Estuve muy feliz en irme. El Islam es algo sobre lo que quiero aprender, es mi voluntad".
Incluso en una entrevista que dio para la televisión turca, después de visitar campamentos de refugiados en ese país y en Siria, Lindsay se mostró con el hiyab, el velo que cubre la cabeza y el pecho de las mujeres musulmanas y se refirió a las reacciones que tuvo su cambio religioso. "En Estados Unidos me crucificaron. Me hicieron ver como si fuera Satanás. Yo era una mala persona por llevar el Corán. Estuve muy feliz en irme y regresar a Londres después de eso porque me sentía insegura en mi propio país. El Islam es algo sobre lo que quiero aprender, es mi voluntad", afirmó en el ciclo Haber Turk, y se mostró preocupada por aquellos musulmanes que viven en el Estados Unidos. "No puedo imaginar cuánta gente atraviesa esto mismo", finalizó.