Las believers se indignaron al ver las imágenes de su ídolo junto a la bella modelo. Justin Bieber (22) comenzó un incipiente romance con Sofia Richie (17) –hija del gran Lionel- y publicó varias fotos de su viaje juntos a Japón. Pero las fans no aprobaron la relación y al cantante canadiense le empezaron a llover críticas en su cuenta de Instagram.
“Voy a hacer mi Instagram privado si no paran con el odio. Esto se está yendo de las manos. Si fueran realmente fans, les gustaría la que gente que a mí me gusta”, escribió el astro. Sin embargo, sus palabras no surtieron efecto en sus más de 78 millones de seguidores. Incluso, su exnovia Selena Gomez también se sumó a las críticas.
"Voy a hacer mi Instagram privado si no paran con el odio. Esto se está yendo de las manos. Si fueran realmente fans, les gustaría la que gente que a mí me gusta", había amenazado Justin, horas antes.
“Si no puedes manejar el odio, entonces deja de publicar imágenes con tu novia. Debería ser especial y quedarse solo entre ustedes. No te enfades con tus seguidores. Ellos te quieren y te apoyan desde antes que nadie lo hiciera”, le comentó la cantante entre los 488.000 que acumulaba a la instantánea.
Furioso, Justin decidió tomar una drástica decisión: cerrar su cuenta en la red social. La estrella teen desactivó su perfil y el hashtag #JustinDeactivatedParty rápidamente se convirtió en tendencia mundial en Twitter.