Durante muchos años, Angelina Jolie y Brad Pitt parecían una dupla imbatible: hermosos y exitosos, las dos estrellas de Hollywood deslumbraban a su paso en todo evento y alfombra roja. Pero la pareja a la que la prensa había bautizado “Brangelina” se derrumbó y, para 2016, la separación se hizo pública, entre escándalos y rumores de todo tipo.
A partir de ese momento, los dos guardaron silencio y se abocaron a intentar armonizar su relación, pensando en el bienestar de sus seis hijos. Pero ahora, la actriz de Maléfica sorprendió al brindar una entrevista a Le Figaro, en la que compartió algunos detalles de sus últimos días con Brad.
“Fue un momento complicado, no reconocía en lo que me había convertido; era más pequeña, como insignificante. Sentía una tristeza profunda y verdadera, estaba herida”, reveló Angelina.
Sin embargo, la actriz pudo encontrarle un lado positivo a ese momento tan duro que señaló como “interesante para volver a conectar con la humildad".
Según contó, lo más difícil luego de la separación fue el reencuentro con ella misma, lo que coincidió con varios temas de salud que debió encarar. Cabe recordar que Jolie venía de practicarse una doble masectomía preventiva por miedo a sufrir cáncer de mama, debido a su antecedente genético familiar.
“Fue un momento complicado, no reconocía en lo que me había convertido; era más pequeña, como insignificante".
Hoy, Angie vive en Los Ángeles, donde reside el papá de sus hijos. “No estoy realmente apegada a esta ciudad. Preferiría viajar con más frecuencia, pero hoy no es compatible con el trabajo de Brad. Yo coopero”, dijo.
"Soy más resistente que antes, pero aún es un momento difícil. Tengo que redescubrir la alegría”.
Mamá full time, dijo que su proyecto de dedicarse por entero a dirigir películas ahora no va de la mano con las necesidades de sus hijos. “Con la separación tuve que revaluar mis elecciones: encuentro necesario estar presente con mis hijos y no estar ausente constantemente”, explicó.
En este sentido, indicó que por ahora seguirá dedicada a la actuación, dado que le resulta más fácil al ser una actividad que le insume menos tiempo.
Asimismo, rescató el haberle dado vida a un personaje como Maléfica y lo definió como una “forma de terapia” en aquel período tan difícil de su vida: "Interpretar a un personaje fuerte y poderoso realmente puede ayudarte a reconstruirte cuando no te sentís bien”.