La segunda gala de eliminación de esta nueva temporada de MasterChef Argentina contó con la presencia de ocho participantes decididos a todo con tal de conformar los requerimientos de Donato de Santis, Damián Betular y Germán Martitegui para permanecer en el certamen.
Micaela, Delfina, Daniela, Rodolfo, Carlos, Candelaria, Silvana y María Sol, debieron cumplimentar nada menos que tres desafíos que los jurados plantearon a partir de una pirámide similar cantidad de niveles.
De esta manera, los ocho nominados debieron cocinar un plato con tomates cherry como ingrediente principal, un segundo con palta y jalapeños y un tercero con hinojo, azúcar mascabo y naranja.
WANDA NARA, SORPRENDIDA CON LA VORACIDAD DEL JURADO DE MASTERCHEF ARGENTINA
En este punto, el tiempo y los requerimientos obligaron los participantes a preparar platos livianos y del estilo de “fingerfood”, que dejaron al jurado con la boca abierta, al punto de que no podían parar de comer, algo que sorprendió a Wanda Nara.
Al ver a los jurados mordisquear sin parar los tartines de tomates cherry confitados de Rodolfo Vera Calderón, Wanda no se contuvo. “¿Estaban con hambre o estamos sin tiempo? En un minuto liquidaron todo”, les preguntó ante la risa del mexicano.
“¿Por qué no cocinan siempre así?”, les preguntó Martitegui, que con sus compañeros siguieron pasándola bien el resto de la noche, lo que motivó una nueva intervención de la conductora. “¿No necesitan agua para bajar todo lo que comen?”, preguntó Wanda al verlos abalanzarse sobre la palta frita de Candelaria.
“Yo sí”, atinó a decir Martitegui con la boca llena de comida, mientras los participantes miraban igual de sorprendidos que la conductora. “¿Media palta se puede comer por día?”, preguntó Betular, y Wanda le contestó: “Ya superaste la dosis del mes”.