Desde que Viviana Canosa (46) reconoció que se había separado de Alejandro Borensztein (59) tras 7 años juntos, una hija en común y un "sí, quiero" en el Registro Civil en 2013, la conductora aseguró que firmar su divorcio fue “muy fuerte”.
"Para mi la felicidad es algo con lo que no puedo transar con nadie. Yo doy todo para ser feliz y a todos para que todos sean felices. En el amor vos no podés poner quién da más y quien da menos, pero mi vara es alta y es durísimo".
En una charla en Vino para vos, el ciclo de KZO de Tomás Dente, Viviana contó que habían pasado “un año en donde nos veníamos replanteando esto” y dio una visión muy particular sobre este desenlace de su pareja con el escritor. “No siento que nuestra relación se haya erosionado. Podríamos haber seguido toda la vida juntos”, lanzó.
"Mi papá tuvo tres by pass en un minuto y eso me hizo ver que la vida es muy finita".
“Es muy rebuscado lo que pasó. Cada uno tiene una vara de la felicidad y yo tengo una altísima. Para mi la felicidad es algo con lo que no puedo transar con nadie. Yo doy todo para ser feliz y a todos para que todos sean felices. En el amor vos no podés poner quién da más y quien da menos, pero mi vara es alta y es durísimo”, expresó.
La animadora confesó que su padre era el modelo de hombre que buscaba y confesó que la enfermedad de él la marcó: “Mi papá tuvo tres by pass en un minuto y eso me hizo ver que la vida es muy finita”.