A poco de que Eugenia “la China” Suárez finalmente le pusiera punto final a los rumores y confirmara que espera a su segundo hijo junto a Benjamín Vicuña, con quien ya tiene a Magnolia, el actor rompió el silencio y habló de esta nueva etapa de su vida.
"Sí, es así. Vamos a ser papás, así que estamos felices en este momento extraño, pero quedándome con lo positivo. Acompañando este embarazo, estando cerca de mis hijos (Bautista, Beltrán y Benicio, frutos de su relación anterior con Pampita). Justo Magnolia con dos añitos está aprendiendo a hablar, hace un montón de cosas. Yo estaba en Chile cuando sucedió esto y por suerte pude viajar a tiempo, para estar con mi familia, que es lo más importante", expresó Vicuña en una nota que dio para una periodista chilena que lo entrevisto por un Live de Instagram.
"Sí, es así. Con la China vamos a ser papás, así que estamos felices en este momento extraño, pero quedándome con lo positivo. Acompañando este embarazo".
"Llevo 66 días en Buenos Aires. No se puede pisar la calle, no se puede salir. Y lo estamos cumpliendo de manera estricta. Lo hemos tomado con mucha responsabilidad. Las primeras dos semanas aquí el presidente determinó, entre otras cosas, que debían estar con su mamá", agregó.
Sin embargo, dio detalles del acuerdo al que llegó con Pampita: “Pero yo lo hablé con la mamá de los chicos y me dijo que estaba superada por la situación, sin gente que pudiera ayudarla, ni niñeras, ni nada. Y lo que se acostumbraba era, con los padres separados, que el padre los pueda ver 30 o 40 minutos, pero luego se transformó y lo arreglamos por algo de sentido común, que los chicos pasaran una semana en cada casa".
"Hablé con la mamá de los chicos y me dijo que estaba superada por la situación, sin gente que pudiera ayudarla, ni niñeras, ni nada. Arreglamos que pasaran una semana en cada casa".
Y añadió: "Y eso que se hizo fue una cosa de sentido común y luego se decretó. Y es la forma correcta que hemos hecho los padres separados. Y esto me alegra mucho porque uno de los beneficios de esto es que los niños están contentos de poder estar con sus papás. Capaz no tenemos en cuenta la gran carga educativa que tienen. El más grande mío se levantaba 7.40 y recién volvía a las 7 de la tarde, es decir que estaba 12 horas fuera de la casa, y llega agotado. Pero la demanda no es menor, por acompañarlos con la tarea, el buen humor".
"Lo que más me ha puesto a prueba son las tareas. Yo estoy con los más grandes, y matemáticas, inglés... es como que se complica".
“Lo que más me ha puesto a prueba son las tareas. Yo estoy con los más grandes, y matemáticas, inglés... es como que se complica. Además, no es que le dejás la tarea y te vas y ellos lo resuelven, sino que tienes que acompañarlos. Es difícil", cerró Vicuña, sincero, sobre su costado paternal.