El 2017 fue un año muy duro para Silvina y Vanina Escudero, a nivel íntimo y mediático, porque tuvieron que hacerse cargo de la enfermedad psiquiátrica de su padre, Enrique (67), quien permaneció un mes y medio internado.
A dos años de eso doloroso episodio, Vanina visitó Los Ángeles de la Mañana, contó cómo los afectó familiarmente el abordaje mediático sobre la salud de su padre y dio detalles de su estado médico actual.
"El diagnostico no sé si lo puedo decir, fue una cuestión psiquiátrica y después apareció un tumor. Ahora mi papá no está internado, pero el tratamiento es largo".
"Con Silvina pasaron por momentos mediáticos muy álgidos, pero hubo uno, la enfermedad psiquiátrica de tu papá, que las liquidó", señaló Ángel de Brito a modo introductorio. Y la bailarina, con calma y un dejo de angustia, tomó la palabra. "Fue una de las peores cosas que nos tocó en la vida, que nos súper fortaleció como familia y a nosotras como hermanas. Con Sil armamos un re equipo entre las dos. Eso me enorgullece de mi hermana”, comenzó diciendo la mujer de Álvaro Navia.
Luego, prosiguió: "Quizás nunca estás preparado para cuidar de tus papás y cuando llega el momento de dejar el rol de hijo, es difícil. Nos tuvimos que hacer cargo de un montón de cuestiones y de todo tipo. Por eso, estoy orgullosa de mi familia, porque lo sorteamos de la mejor manera que pudimos y logramos rescatar los vínculos… Porque de repente nos encontrábamos con un papá que no reconocíamos y decíamos '¿cómo puede ser?'. Yo con cualquier persona que me encuentro hoy en la vida, siempre me rescata cualidades de mi papá, lo generoso, lo solidario. Y ese es el papá que yo tengo guardado en mí y el que queríamos recuperar".
"Quizás nunca estás preparado para cuidar de tus papás y cuando llega el momento de dejar el rol de hijo, es difícil. De repente nos encontrábamos con un papá que no reconocíamos".
Consultada puntualmente por la enfermedad mental de Enrique, contestó con reserva: "El diagnostico no sé si lo puedo decir, fue una cuestión psiquiátrica y después apareció un tumor… Ahora mi papá no está internado, pero el tratamiento es largo. Él estuvo internado un mes y medio. Y lo podíamos ver. Pero eso también fue una de las cosas más difíciles: entrar a ese lugar es duro, terrible".