Un llamativo gesto de Dolores Barreiro en una nota con Pampita, que decidió marcharse al ver que la iban a entrevistar a su colega, resucitó un viejo conflicto que mantenían y trajo de vuelta la recordada “guerra de las modelos” del 2000.
Matilda Blanco develó los entretelones de “las jirafas” y “las suricatas”, los apodos que recibían.
“Este es un conflicto que viene de larga data. Debe tener por lo menos más de 20 años cuando se hacían los famosos desfiles de Roberto Giordano. En grandes épocas de la discriminación en la moda estaban las pasadas de las altas y de las bajas”, empezó contando la productora de moda en A la tarde.
En ese momento Flor de la Ve le recordó a Matilda los nombres que recibían las mannequins y las modelos más bajitas. “No, pero contá cómo se decían. Se decían ‘las jirafas’ y ‘las suricatas’. Suricatas porque les andaban entre las piernas a las altas”, dijo, mientras la asesora de moda la avalaba.
“Había mucha discriminación y los castings eran ‘vos no salís por esto’, ‘no abrís por aquello’, ‘vos abrís y vos cerrás’. ¡Era una matanza!”, aseveró Matilda.
Flor de la Ve: "Contá cómo se decían. Se decían ‘las jirafas’ y ‘las suricatas’. Suricatas porque les andaban entre las piernas a las altas".
Matilda Blanco contó cómo Pampita dejó con la boca abierta a las modelos altas
No medir más de 1.70 mts hacía que muchas modelos no pudieran subirse a las pasarelas, pero Pampita llegó en el 2000 para romper con eso. “Un día se armó una pasada con todas las más altas, las que en ese momento eran las elegidas y las preferidas de todo el mundo”, recordó la panelista del ciclo de América.
“Estaba Dolores Trull, Florencia Raggi, Dolores Moreno y otras. Mandan para que se acomoden todas para una foto final y alguien dice ‘y cierra Pampita’. ‘No, pero cómo vamos a poner a Carolina’, dijo una productora de moda y yo estaba atrás”, rememoró. “Las modelos cuando vos te querías ponerte para una foto arrancaban con los codazos”, aseveró, sobre un “clásico” de los desfiles de Roberto Giordano.
"Las modelos cuando vos te querías ponerte para una foto arrancaban con los codazos. Cuando ella vuelve de la pasada, se pone estirada, tirada en el piso, en el medio de la foto. Las demás se quedaron con la boca abierta, pintadas".
“¡Era la defensa de Los Pumas! ¡Andá a pasar ahí!”, bromeó Florencia, sobre los codazos y Matilda contó cómo Pampita sorteó la actitud de sus colegas altas. “¿Qué hizo Carolina? Hizo toda la pasada, con ese cuerpo y esas lolas que se movían, con esa frescura y Giordano y Teté que hablaban de ella sin parar. Y cuando ella vuelve se pone estirada, tirada en el piso, en el medio de la foto”, destacó, mientras en el ciclo le dedicaban un aplauso.
“Las demás se quedaron con la boca abierta, pintadas”, recordó. “El inconmensurable poder de la personalidad”, concluyó, sobre la fórmula del éxito de Pampita.