Hubo lágrimas en la victoria de Argentina, campeón del Mundial Qatar 2022, y unas muy especiales tuvo Tití Fernández, el periodista deportivo que se conmovió por la épica de Lionel Messi y todos los jugadores de la Selección y anunció que se retira de las transmisiones en el campo de juego y tuvo palabras muy especiales al recordar a Soledad, su hija fallecida.
En una entrevista con Enzo Fernández, pocos minutos después de la victoria del equipo nacional, Titi y el jugador entonaron Muchachos, la canción de La Mosca que se volvió el hit “mundialero”. “Y al Diego, desde el cielo… ¡Somos campeones!”, entonaron al unísono.
En ese momento, el periodista lanzó una significativa dedicatoria. “Con Diego, con la Tota y con mi hija, con la Sole, que está gritando también, carajo”, arrojó, con la voz quebrada al mencionar a la joven, que falleció a los 26 años en un accidente automovilístico en 2014 en el Mundial de Brasil.
"Hoy fue mi último partido en el campo de juego. Me estoy despidiendo con la felicidad que tenés vos de ser campeón del mundo. Yo también me siento campeón del mundo con estos chicos".
TITÍ FERNÁNDEZ CONTÓ QUE SE RETIRA DE LAS TRANSMISIONES DE FÚTBOL
Súper sensibilizado, el exparticipante de MasterChef Celebrity 2022, pidió la palabra en la transmisión de la TV Pública para anunciar su retiro de la labor que desempeña en el campo de juego desde hace 47 años. “Es un día muy especial para mí. Para todos los argentinos es un día muy especial”, arrancó diciendo.
“Yo les quiero agradecer a todos. No saben la felicidad que tengo”, aseguró, emocionado. “Hoy fue mi último partido en el campo de juego. Me estoy despidiendo con la felicidad que tenés vos de ser campeón del mundo. Yo también me siento campeón del mundo con estos chicos”, señaló.
“A mi familia. A mi querida esposa, que está con covid y está sola, pobrecita. Norita, por suerte pasado mañana voy a estar ahí para cuidarte. A mis hijos, a mi nieto. Los recontra amo”, afirmó. “El fútbol me dio todo, me sacó una sola cosa que yo quería mucho”, concluyó, entre lágrimas