Tamara Báez, que acostumbró a sus seguidores de Instagram con selfies y videos de sí misma, en este último tiempo prefirió no mostrar su rostro en redes.
Luego de varios días compartiendo únicamente postales de su hija, Jamaica, y de su perra, Bandida, subió una imagen de su cara e hizo una insólita confesión.
"Extrañaba mis pestañas postizas, por falta de ellas no sabía historias a Instagram".
"Extrañaba mis pestañas postizas, por falta de ellas no sabía historias a Instagram", reveló Tami, al pie de una foto luciendo el nuevo aplique en su rostro.
FUERTE RECLAMO DE TAMARA BÁEZ A L-GANTE POR COMERLE LA CENA
Antes de cerrar, a Tami se la escucha reclamándole a su ex.
"Encima que no viene nunca, viene a comer...", sentenció, entre risas.