En medio del escandalosa separación de Miriam Lanzoni (39) y Christian Halbinger (36) -luego de que el empresario le fuera infiel con Juliana Rojo, la dueña del catering que contrataron para organizar su cumpleaños- Ángel de Brito diparó una bomba en vivo.
“Francisco, el marido de Juliana, sospechaba que ella le estaba siendo infiel y había puesto cámaras de seguridad en la casa”, había informado el periodista en Los Ángeles de la Mañana.
“Lo único que quiero es limpiar mi nombre porque hay varias notas dando vueltas diciendo que yo soy el ex psicótico que le puso cámaras en la casa (ya que existiría un video de Juliana y Christian teniendo sexo) y eso no es cierto”.
En medio de las repercusiones, Francisco, que tiene a su hijo Mateo, de 3 años, con Juliana, rompió el silencio en Siempre Show (lunes a viernes a las 19 por Ciudad Magazine): “Lo único que quiero es limpiar mi nombre porque hay varias notas dando vueltas diciendo que yo soy el ex psicótico que le puso cámaras en la casa (ya que existiría un video de Juliana y Christian teniendo sexo) y eso no es cierto”, aclaró.
“No puse ninguna cámara y creo que no hay ningún video porque esto fue el viernes pasado en una casa en Nordelta que había alquilado junto a Juliana para pasar las vacaciones con nuestro hijo. El acuerdo era que ella iba a ir 15 días y los otros 15 días, yo. Y en esa casa no hubo ningún video. Si hay uno que se muestre para ver si esto es así. Que pasó es un hecho”, agregó, tajante.
Por último, el entrvistado reveló que ya había habido un episodio entre su ex y Halbinger que no le gustó nada: “íbamos a pasar Año Nuevo con Juliana pero dio la casualidad que estábamos en un evento y Christian estaba de invitado. Los enganché hablando juntos, como si nada, y fui a meter la trompa porque viste como somos los lobos que tenemos olfato. Entonces me metí en la conversación y al final hubo un apretón de manos medio raro y me quedó la chispa. Le dije que el 31 no quería pasarlo con ella porque estaba mal por esto y ahora me entero de todo”.