La madrugada del sábado 23 de febrero Natacha Jaitt murió en medio de un episodio que se presenta cada vez más confuso, en el marco de una supuesta reunión laboral en un salón de eventos de BenavÍdez. En plena investigación judicial por el fallecimiento catalogado como “muerte dudosa”, Ulises Jaitt reiteró sus reparos a la explicación de que haya sido una muerte natural la de su hermana mayor.
En una nota con Los Ángeles de la Mañana, Ulises afirmó: “Me voy a reunir con médicos, porque ese cuento de la falla multiorgánica no creo que haya sido así nomás, sino que para mí le pusieron algo en la bebida”. En ese momento, la cronista acotó que el abogado de la familia había mencionado la posibilidad de que la intoxicaran con “un somnífero”, a lo que Ulises admitió: “Vamos a estar comprobando eso”.
"Sigo pensando que acá hubo un complot para acabar con su vida".
Para reforzar sus argumentos, el periodista enfatizó: "Cuando hablan de un corazón que estaba deteriorado, es una mentira total. Voy a presentar los estudios del corazón que le hicieron hace poco, en donde el corazón de Natacha estaba perfecto". Acto seguido, Ulises sinceró: “Sigo pensando que acá hubo un complot para acabar con su vida”.
Al final, Ángel de Brito le preguntó si tenía apuntado a alguien en particular como instigador de la muerte de Natacha, y Ulises Jaitt concluyó: "No lo sé. Están investigando los fiscales. Hasta que no haya una prueba no puedo decir nada. Hipótesis hay un montón ya que Natacha tenía mucha gente en contra".