Parecía que el amor entre Lucía Celasco (23) y Joaquín Rozas (27) iba a durar para siempre, y de hecho se prolongó durante cinco años. Pero no fue así. La nieta de Susana Giménez y el empresario gastronómico le pusieron punto final a su noviazgo, en el que incluso llegaron a mantener una convivencia informal dado el tiempo que pasaban juntos en sus respectivas casas.
Por estas horas, Lucía se encuentra de vacaciones en Hawaii junto a su amiga Camila Costantini, la nieta del millonario Eduardo Costantini, al tiempo que Joaquín permanece en Buenos Aires con el apoyo de sus amigos. La decisión de separarse la habría tomado Celasco hace algunas semanas, según informó la revista Caras a través de íntimos de la pareja: "Nos encontramos a Joaquín en varias oportunidades y no lo vimos de buen ánimo. Nos contó que había terminado su noviazgo con Lucía y se lo notaba triste".
Al parecer llevaban varios meses en crisis, según informa la publicación. Un indicio del mal momento era que ya no se veía a la parejita top compartiendo momentos en el restó Bartola, propiedad de Rozas, y que ya no pasaban las noches juntos con tanta frecuencia.