En medio de un extenso mano a mano de Pamela David con Jorge Rial para Pamela a la tarde, la conductora se refirió al polémico saludo de Diego Maradona a su hija Dalma por su cumpleaños y fue el punto de partida para que el conductor haga hincapié en su propia historia familiar.
Así fue el ida y vuelta de Pamela con Rial:
-¿Silvia D'Auro (la mamá de Morena, quien acaba de ser mamá de Francesco junto a Facundo Ambrosioni, y Rocío) apareció? ¿Habló ahora con Morena?
-No, no habló. Pero eso ya es algo que está despersonalizado. Ya está.
-Se la borró de la vida...
-No, no se la borró... se borró. Su lugar lo tuvo siempre, cuándo quiso y cómo quiso, nunca se prohibió nada.
"(Silvia D'Auro) no habló con Morena (su hija, quien acaba de ser mamá de Francesco junto a Facundo Ambrosioni). Pero eso ya es algo que está despersonalizado. Ya está. No se la borró... se borró".
-Ella se fue...
-Ella se fue, tomó una decisión. Para mí era mi mujer, pasó a ser mi exmujer y uno de las parejas se opera más rápido. No la conozco a Gianinna ni a Dalma, salvo por notas, pero sí me puedo acercar al dolor que tienen. Porque el dolor que tienen ellas, yo lo viví con mis hijas, entonces más o menos lo puedo empardar.
-Y por tus hijas, ¿no volverías a hablar con Silvia?
-Yo, por mis hijas, hago lo que sea. Ahora, eso no sería lo importante porque conmigo no tiene que hablar nada. Acá hay una ausencia total. Yo hablaría quinientas veces con quien sea si mis hijas quisieran retomar ese lazo. Pero el lazo es con ellas, no conmigo. Conmigo es parte del pasado, no hay nada que nos una, pero con ellas sí. Pero yo no tengo nada que hablar. Repito: si eso llegara a servir y mis hijas quieren -porque ellas tienen que querer, no yo- obvio que me siento a hablar. Nunca estuve cerrado a eso. En ese sentido no existieron peleas, ni alejamientos, ni nada de eso. Además, nadie le llena la cabeza a nadie. Los chicos son más vivos que nosotros.