Este lunes comenzó la tercera edición de Bake Off Argentina que culminó con la elección de Silvina Santarelli (41) y Hernán Canalini (35) como los dos personajes más destacados de la noche. El premio (cinco minutos extra para utilizar en la gala del domingo) se lo llevó el arquitecto platense pero las menciones en las redes sociales fueron para la contadora y esposa del exfutbolista Gabriel Milito, porque tiene un emprendimiento culinario.
“Yo la sigo en Instagram y hace una semana me enteré que entró. Es pastelera profesional, vende y da clases. Tiene cursos con Pedro Lambertini y fotos con Juliana López May... Yo completé el formulario y no entré”, señala un tweet que comenzó a circular este lunes por la noche, durante la emisión de Bake Off. En efecto, Santarelli cuenta con un perfil de Instagram (@mamasilvicocina) en el que mezcla sus fotos con famosos cocineros con otras de su familia y sus recetas y tips.
Asimismo, la participante también cuenta con un perfil personal cerrado en el que comparte fotografías con sus íntimos y en donde se la puede ver junto a Donato De Santis (jurado de MasterChef Celebrity) en un curso en 2015. “Con Ine y el genio de Donato aprendiendo a hacer cannoli, tarta caprese, tiramisú y baba al ron”, se puede leer. Todas estas publicaciones se encuentran a la vista, y son fácilmente verificables, aunque la producción del reality no ha emitido todavía un comunicado oficial.
En 2020, la producción de Bake Off tuvo que tomar la determinación de descalificar a la ganadora, Samanta Casais, debido a que había omitido especificar en su ficha de inscripción que había trabajado algún tiempo en emprendimientos gastronómicos, un requisito que la hubiera dejado fuera del certamen. En su lugar, declararon ganador a Damián Basile, al que también señalaron como profesional en las redes sociales a raíz de la aparición de grabaciones de un programa de cocina en el que participaba como ayudante de la chef y porque ofrecía sus productos en las redes sociales. ¿Ocurrirá lo mismo con Silvina?