Cuidadoso de su intimidad familiar, Soledad Fandiño (36) y René Pérez (40) transitaron sus siete años de amor manteniendo un bajo perfil. Lo mismo hicieron al convertirse en padres, en 2014, evitando la exposición de su hijo, Milo.
Cada uno por su lado, tras la confirmación de la separación, el exlíder de Calle 13 decidió mostrar por primera vez la cara de su varoncito a través de un enorme tatuaje que se hizo en la mano.
"Ahora Milo volará conmigo y cantaremos juntos. Gracias por tu arte", escribió René, de un modo poético, en la foto que subió a Instagram, en la que lució el especial tattoo de la carita de su niño, quien en pocos días cumplirá 4 años.