Cuando la casa parecía estar en orden, el mes pasado Morena Rial hizo público que la relación con su padre, Jorge Rial, no transita por un buen momento, luego de haber limado asperezas del pasado por las cuales también estuvieron enojados y distanciados.
En un mano a mano íntimo con Rodrigo Lussich en El Show de los Escandalones, el conductor de Intrusos hizo un profundo mea culpa sobre su rol paterno, especialmente, analizando los dolorosos cruces que vivió y vive con Morena, dado que el vínculo con su otra hija, Rocío, es más armonioso.
"Ahora Morena está en Córdoba. Tampoco quiero meterme. A veces hay que mantener distancia. Cuando venís golpeado, a veces la distancia también es un síntoma de amor. No es fácil equilibrar las cosas", comenzó diciendo Jorge, luego de ver una imagen suya, con su nieto, Francesco, en brazos.
"Creo que las peleas son reproches. Algunos exagerados, algunos injustos. Pero los padres son los huesos donde vienen a afilar los dientes los hijos".
Luego, Rial puntualizó: "Yo, la verdad, si hago un balance, no creo que haya sido un buen padre. No creo que sea un buen esposo, que lo haya sido y lo sea ahora... A veces veo cosas y digo 'podría haber mejorado muchas cosas. Podría haber criado a mis hijas de otra manera’. Yo me hago responsable de algunas cosas que pasaron con Morena. Es mi responsabilidad. Yo asumí la paternidad 100 por 100, pero nunca hice de madre. Ese lugar es imposible. El hombre no puede ocupar ese lugar, no nos da la cabeza, el sentimiento”. Y agregó: "A mí me tocó no delegar y no sé si lo hice bien. Yo todavía cargo con mucha culpa, con mucha responsabilidad. Yo no sé si algunas cosas las hice bien".
Siguiendo el sentido descargo de Jorge, Lussich repreguntó: "¿Tus hijas te lo han reprochado?". Con contundencia, el periodista reflexionó: "No directamente, pero creo que las peleas son reproches, también. Algunos exagerados, algunos injustos. Pero los padres son los huesos donde vienen a afilar los dientes los hijos. Nosotros somos donde descargan, putean, y lo que nos pasa es que nuestras peleas se hace públicas. ¿Si me duele? Horrores. En cada pelea siento que voy perdiendo años de vida. Es mi gran miedo siempre, el cuerpo responde. Al cuerpo hay que cuidarlo mucho".