El viernes 20 de octubre a la 6 de la mañana, murió Federico Luppi a sus 81 años. El reconocido y multipremiado actor había sido internado en la Fundación Favaloro el último miércoles con un delicado cuadro de salud. Al entierro asistieron numerosas figuras argentinas, su hija Marcela y la última mujer del actor, la artista española Susana Hornos, con quien estuvo las últimas dos décadas. Pero hubo una gran ausencia: su hijo uruguayo, Leonardo, a quien el actor nunca quiso conocer.
"Nnunca lo sentí como padre, nunca estuvo conmigo, nunca nada. Ni siquiera alguna comunicación. No me llegó, no me afectó".
El joven -que cumplió 18 años dos días antes de la muerte de Luppi- habló por primera vez ante los medios. “Yo estaba durmiendo, me dice mi madre que se murió y tardé en reaccionar. Me sorprendió, no sabía que estaba enfermo. Sabía que había tenido un accidente hace unos meses, pero no que estaba internado. Me puse en Google a ver si era cierto y vi las noticias”, contó Leonardo en Confrontados.
“No lloré, nunca lo sentí como padre, nunca estuvo conmigo, nunca nada. Ni siquiera alguna comunicación. No me llegó, no me afectó. Lo reconozco como mi padre porque es mi padre, pero la relación no existió. No lo vi nunca”, remató el muchacho, fruto de la relación de Luppi con la actriz uruguaya Brenda Accinelli.