Este sábado, la familia de Barron Hilton anunció que el patriarca, fundador de un imperio millonario en torno del negocio hotelero, había fallecido a sus 91 años y por causas naturales, en su casa de Los Ángeles.
Pero grande habrá sido su estupor al descubrir que el magnate había dejado tan sólo el 3 por ciento de su inmensa fortuna a sus parientes, entre ellos la célebre Paris, una de sus nietas.
Mientras que la esposa de Hilton, Marilyn Hawley Hilton, ya había muerto en 2004, heredarán al magnate ocho hijos, 15 nietos y cuatro bisnietos. A la hora de estimar cuál sería esa "pequeña porción" que les tocará en la repartija, se calcula un monto de 100 millones de dólares.
¿Y qué pasará con el 97% del patrimonio? Barron quiso destinar los 2.900 millones restantes a la Fundación Conrad N. Hilton, una ONG que desde 1994 apoya causaas variopintas que van desde iniciativas católicas hasta asistencia contra desastres naturales, programas de juventud y lucha contra el HIV infantil.
Hace unos días, su nieta, Paris, compartió su dolor en Instagram, donde describió a su abuelo como "una leyenda; un visionario, brillante y generoso".