Un día después de la polémica que generó Viviana Canosa al tomar en cámara dióxido de cloro, una sustancia que se presenta como la “cura contra el coronavirus” desde un video viralizado en redes por un supuesto científico alemán llamado Andreas Kalcker, la conductora usó su cuenta de Instagram para defender su postura.
“Prefiero el amor al miedo, prefiero luz a la oscuridad, prefiero despertar a estar adormecida, prefiero la libertad a la esclavitud. Prefiero CDS, con todo lo que dicen, a una vacuna que los mismos creadores piden inmunidad/ impunidad por sus efectos colaterales”, empezó escribiendo la conductora en su descargo en la red social tras el aluvión de críticas que tuvo.
"Prefiero mi sana locura a una cordura infligida y forzada. Estudien, investiguen y no repitan. Cuando el rio suena… Mi cuerpo es mío y tengo derechos sobre él".
“Prefiero patear el tablero escuchándome y no ir en contra de mi naturaleza. Prefiero mi sana locura a una cordura infligida y forzada. Estudien, investiguen y no repitan. Cuando el rio suena… Mi cuerpo es mío y tengo derechos sobre él. Uso barbijo y tapabocas...pero eso no calla mis ideas creencias y decisiones. Y a los que agreden, mejor utilicen su tiempo investigando. ¡Estudiando! ¡Muchas gracias!”, finalizó la conductora, más polémica que nunca.
En la Argentina los supuestos beneficios de la sustancia, sin ningún sustento en la comunidad científica para el tratamiento de enfermedades, hicieron que aumente el consumo en nuestro país y que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) tenga que emitir un comunicado. Allí se refirió al químico como “peligroso” y remarcó que "no hay evidencia científica sobre ssu eficacia y la ingesta o inhalación de estos productos podría ocasionar graves efectos adversos”.
El consumo de dióxido de cloro y el clorito de sodio pueden causar irritación en el esófago y estómago, dolor abdominal, náuseas, vómitos, diarrea e intoxicaciones severas, entre otras complicaciones que pueden incluir graves trastornos hematológicos, cardiovasculares y renales.
"En base al informe de este año del Organización Panamericana de la Salud (OPS), resulta necesario destacar que la ingesta de dióxido de cloro y el clorito de sodio reaccionan rápidamente en los tejidos humanos y si se ingieren, pueden causar irritación en el esófago y estómago, dolor abdominal, náuseas, vómitos, diarrea e intoxicaciones severas, entre otras complicaciones que pueden incluir graves trastornos hematológicos, cardiovasculares y renales", advierte el Anmat.
"Además, la inhalación puede generar edema pulmonar, broncoespasmos, neumonitis química y edema de glotis, entre otras complicaciones respiratorias como bronquitis crónica y erosiones dentales, así como complicaciones en otros órganos del cuerpo", concluye en su comunicado sobre la falsa "cura para el coronavirus" que tomó Viviana Canosa.