Cuando el mundo arrancaba un periodo gris signado por la crisis sanitaria del coronavirus, surgía en un reality show llamado Bake Off Argentina, El gran pastelero la oportunidad para bañar de azúcar el drama diario. Paula Chaves estaba al frente y ahora retorna para una nueva temporada. Porque el público necesita vacunas, pero también quiere pastel.
Son las nueve de la mañana y le queda toda una jornada de grabación. Su día comenzó tres horas antes, pero ahora la animadora conversa con Ciudad mientrs la terminan de maquillar sobre cómo su programa mutó a un formato diario. La incorporación de Dolli Irigoyen al jurado, los perfiles de los nuevos partici…“¡Ay! Esperame un segundo que me están llamando del colegio de mi hija…”, interrumpe como con un cuchillo (¿para tortas?) la charla.
Diez minutos después, se disculpa. "Está todo perfecto. Me asusté. Era la directora".
"Cuando me llamaron para Bake Off dije '¡¿Qué?! ¿Un reality de pastelería?'. '¿Quién va a mirar un reality de pastelería con personajes amateur cocinando?'. Después mirá lo que pasó. Fue impresionante".
Así irrumpe la necesidad de Paula de ondear la bandera de las maternidades más libres. “Las madres no debemos ser juzgadas nunca”, asegura.
Cuenta de qué se trata el curso de doula que realiza desde principios de año, cómo es ser mamá de tres hijos de corta edad durante una pandemia y termina lanzando una fuerte proclama, a propósito de la ¿polémica? sobre el baile del caño de Pampita pocos días después de dar a luz. ¡Y tiene un par de cositas para decirnos!
"No me da presión venir de MasterChef y de La Voz Argentina, que fueron programas que la rompieron. Yo confío mucho en lo que hacemos y lo que pasa en la carpa es tan real".
-Vuelve Bake Off Argentina, El Gran Pastelero, con producción de WarnerMedia Latin America, por Telefe. ¿Cómo es tu desafío como conductora en esta tercera temporada?
-En ninguna parte del mundo se hizo diario y la producción y el canal tuvieron que pedir permiso al formato de Inglaterra para adaptarlo y hacerlo asi. Es muy apasionante. Conozco a los pasteleros desde otro lado porque tienen más de dos oportunidades para sorprender al jurado. Cambió todo y está buenísimo. Es redivertido. Yo soy medio fan de este programa, más allá de que lo conduzco. Me compenetro, me emociono, me río con ellos. Me atrapa esa carpa.
Foto: Telefe
-¿Sentís presión después de una segunda temporada que fue un éxito y lo bien que les fue a La Voz Argentina y MasterChef Celebrity?
-Cuando a mí me llamaron para hacer un reality de pastelería dije “¡¿Qué?! ¿Un reality de pastelería?”. Yo no consumía un programa así y me daba cosa decir “¿quién va a mirar un reality de pastelería con personajes amateur cocinando?”. Después mirá lo que pasó. Siempre fue el programa más visto del año y eso es impresionante. No me da presión porque lo disfruto. No pienso que venimos de MasterChef y de La Voz Argentina que fueron programas que la rompieron. Yo confío mucho en que nos encanta lo que hacemos y nos divertimos. Lo que pasa en la carpa es tan real, que nos reímos y nos emocionamos, que después lo que pase con el público es azar. Tengo una frase que una vez me dijo el Chato Prada y no me la olvido más: “Vos nunca te hagas cargo ni del éxito, ni del fracaso”. Y yo vivo así.
"Al ser una competencia diaria hay desafíos técnicos, creativos, pruebas en equipo. Hay mucha variedad. Es una competencia apasionante y que sea diaria la hace aún más apasionante".
-Una de las claves fundamentales del programa son los participantes, de quienes la gente se tiene que enamorar y comprar sus historias. ¿Cómo son sus perfiles?
-Es un casting que está buenísimo. La productora se encarga desde hace muchos años de esto, imagínate que fueron los que me eligieron a mí para Súper M. La tienen reclara. Siempre pasa, de años anteriores, que yo me iba dando cuenta al principio ‘este va a picar en punta’ porque es muy bueno. Y este año es tan parejo el nivel de los catorce pasteleros que, un día sobresale uno y otro día ese se revienta contra un abatidor porque no le salió absolutamente nada. Al ser una competencia diaria que se define el domingo, más allá de que el nivel es súper parejo y puede ganar cualquiera, es difícil mantener la excelencia. Hay desafíos técnicos, creativos, pruebas en equipo. Hay mucha variedad. Es una competencia apasionante y que sea diaria la hace aún más apasionante. Van a conocer a los personajes y los van a amar.
-Me imagino que para quienes te eligieron siendo tan chica como concursante de Súper M 2003, este reality show de modelos que ganaste, es un gran orgullo que vos conduzcas el programa.
-La productora general, Pato (Patricia Martin), fue quien trabajó conmigo en Súper M y Foca, el sonidista, también. Nos vamos acordando de cosas de aquella época. El camarógrafo, Fabi, es el que me hacía las preguntas en el reality. Yo a ellos no los vi más. Salí cuando tenía 18 años y reencontrarnos en la primera temporada fue reloco. Me eligieron en aquel momento y ahora me volvieron a elegir para hacer un proyecto tan lindo como este. Más allá de que los conozco hace un montón y que me conocen desde chica, es un equipo con una gran calidad humana.
"Pampita no tiene que dar explicaciones por su baile. Para bien o para mal, siempre se opina de la mujer y no de un hombre. Para mí hay que sacar del foco eso y que cada uno viva su posparto como se le canta y el puerperio como se le antoja. No hay un ideal".
-¿Cómo se dio la incorporación de Dolli Irigoyen al jurado?
-¡Es amorosa! Yo le tenía un respeto, pensaba en ir de a poco, pero es una divina total. Se adaptó rapidísimo, es una pastelera con mayúsculas. Los participantes cada vez que le hablan siempre reciben comentarios positivos, para ayudarlos. Es una incorporación súper beneficiosa para el programa y estamos chochos.
Paula Chaves, mamá
-¿Cómo te organizás con las horas de grabación y el tener que dejar a tus hijos?
-Ahora Olivia (8) va al colegio doble turno, Baltazar (4) va a la tarde, Pedro (Pedro Alfonso) está grabando una serie para Flow y yo me llevo a Filipa (1), así que imaginate… Todos los días es un chino para organizar quién lleva a cada uno y en la casa de quién se queda porque yo termino tarde, a Baltazar que hay que ir a buscarlo al mediodía, quién se queda con él a la mañana, quién le da de comer. Estamos en ese nivel de organización, pero se va llevando. Es un lío, pero somos agradecidos de poder estar mucho tiempo en casa y poder ocuparnos de ellos full time, y también estos meses de estar fuera. Nos podemos organizar con mamás del jardín, familiares y amigas para que a los nenes no se les cambie tanto la rutina.
-¿Tenés una persona que te ayuda con los chicos y las tareas de la casa?
-Sí y es como si fuera mi hermana, la amo y ella viene conmigo a Bake Off. Pero siempre tengo que encontrar a alguien que se quede con Baltazar y entre cuñadas, amigas y mi mamá vamos haciendo malabares. Con Pedro somos unos agradecidos de poder estar todo el tiempo que estamos con nuestros hijos sabiendo que hay padres que tienen que salir a trabajar a los tres meses de su bebé, no tienen la posibilidad de criarlos y de estar más con ellos porque tienen que irse a ocho o diez horas de casa.
"Oli hizo el primer grado en pandemia vía Zoom, Baltazar hizo su primer año de jardín también de forma virtual y Filipa, bárbara, era bebita y se la pasó adentro de casa. Para los chicos es complicada la pandemia, pero están rebien".
-¿Tuviste miedo al volver a trabajar?
-No, no estaba asustada. Ya estoy vacunada, ya tuve coronavirus y desde ese lado estoy tranquila. Nos hisopamos dos veces por semana, acá se sigue todo el protocolo porque es grande, hay aire libre, tiene ventilación cruzada y en ese aspecto no me da miedo. Siento que la cuarentena la viví tranquila porque estaba gestando, parí y no pensaba mucho. A veces me da la sensación que el año pasado no pasó, que no lo tengo registrado.
-¿Cómo les pegó a tus hijos la cuarentena?
-Es complicado para los chicos. Oli hizo el primer grado en pandemia vía Zoom, Baltazar hizo su primer año de jardín también de forma virtual y Filipa, bárbara, era bebita y se la pasó adentro de casa. Para los chicos es complicado, pero están rebien. Mucha contención, mucho diálogo. En casa somos de poner las emociones sobre la mesa y ver qué es lo que les pasa y lo que nos quieren decir. Oli está dejando de ser niña para pasar a otra etapa. Balta está en el medio de la bebita y la más grande y de repente Oli ya no quiere jugar más con él. Es un loop constante. Nunca frenamos. Termino de hacer la tarea con Oli, me pongo con Baltazar, termino ahí y la baño a Filipa. Así nos vamos rotando con Pedro.
"La tribu de mujeres para mí es fundamental, el tener una tribu de crianza con cada hijo".
Paula Chaves, la doula
-Contaste que tenés el apoyo de tus amigas, tu mamá, las mamás del colegio, tus cuñadas. Un sostén femenino muy fuerte.
-La tribu para mí es fundamental. Más allá de las amigas y los familiares, el tener una tribu de crianza con cada hijo, un grupo de mujeres que conocí en gestación, me gusta. Ahora estoy haciendo un curso de doula, que son mujeres que acompañan procesos de gestación, embarazo, puerperio, lactancia. Lo empecé en marzo y ahí hice también mi tribu de mujeres. Lo disfruto un montón. Me nutre y me hace muy bien tener un grupo conteniéndome.
-¿Qué rol tiene una doula? ¿Qué tipo de tareas realiza?
-Es una mujer que acompaña a otra mujer, o a otra familia, en la búsqueda de un embarazo, en el momento de la gestación y en el momento del posparto. Sería una acompañante puntualmente de la mujer, de ese lado que queda un poco desatendido del sistema de salud. Las parteras están para cuidarnos, pero no todas son súper mega amorosas. Esto de poder transitar el embarazo de otra forma, ya desde el día uno pudiendo indagar en lo que nos pasa, de cómo gestar, informarnos. Esto que siempre trato de informar desde mi experiencia y si a alguien le resuena, está buenísimo. No es que quiero ir por la vida convenciendo gente, sino dando mi punto de vista y que si a alguien le resuena, tenga la posibilidad de indagar un poco más, informarse.
"Una doula puede acompañar en el proceso de búsqueda de un embarazo que se hace largo, angustiante y bastante profundo. Yo creo que la maternidad comienza cuando una tiene el deseo de buscar un hijo".
-¿Incluso una doula está antes de un embarazo?
-Sí, puede estar en el proceso de buscar un hijo puede estar. En el momento en el que a vos te resuene tener una doula está buenísimo porque a veces el proceso de búsqueda de un embarazo se hace largo, angustiante y bastante profundo. Uno va buscando adentro de uno, remueve heridas y emociones tapadas. Yo creo que la maternidad comienza cuando una tiene el deseo de buscar un hijo.
La fuerte defensa de Paula Chaves a Pampita por el debate de su baile del caño tras dar a luz
-Hace unas semanas dio que hablar el baile del caño de Pampita en TV tras ser mamá. ¿Vos qué opinión tenés?
-Yo siento que, para bien o para mal, siempre se opina de la mujer. Nunca se opina si un hombre volvió al trabajo muy temprano o pasó mucho tiempo después de ser padre. O si se tomó mucho tiempo en su casa. No se opina de un hombre. Siempre se opina de la mujer. Para mí hay que sacar del foco eso y que cada uno viva su posparto como se le canta y el puerperio como se le antoja. No hay un ideal.
"Pampita no tiene que dar explicaciones. Yo no vi a nadie cuestionando a Andy Kusnetzoff, y no lo digo por él específicamente, si volvió muy rápido a la televisión. Todo siempre puesto sobre la mujer y hay que empezar a correrse de ahí".
-Cada una tiene sus propios tiempos.
-Hay mujeres que necesitan salir enseguida de su casa, otras necesitan quedarse maternando un año y otras que quisieran maternar un año, pero tienen que volver a sus trabajos afuera a los tres meses. Me parece que hay que sacarle el foco a Pampita, o a cualquier otra. Siempre se pone a la mujer o idolatrándola porque “mirá qué divina, volvió al mes después de tener un hijo” o “ay, mirá qué mala madre que es”. Siempre se la juzga para bien o para mal y como sociedad tenemos que sacar el foco de ahí. Cada una hace lo que puede con la historia que tiene y como quiere atravesar su maternidad. No debemos ser juzgadas nunca.
-Incluso Pampita tuvo que decir que, aunque era su deseo hacer este baile, tenía sus momentos de bajón como para justificar que no era la Mujer Maravilla.
-Pampita no tiene que dar explicaciones. Yo no vi a nadie cuestionando a Andy Kusnetzoff, y digo él porque hace un rato vi la nota de que había sido papá, diciendo que volvió muy rápido a la televisión. Y digo Andy porque escribió algo muy lindo sobre la neonatología y de todo lo que ellos habían vivido, no lo digo específicamente por él. Nosotras los parimos, los gestamos, los amamantamos, pero la maternidad y la paternidad son compartidas. No se pone en juicio el rol del padre, está todo siempre puesto sobre la mujer. Hay que empezar a correrse de ahí. Si ella se quiso subir a un caño y lo hizo bien, adelante.
Paula Chaves, aquí y ahora
-Estoy a mil por hora y trato de disfrutar y de respirar conscientemente. De agradecer por poder decir ‘qué lindo trabajar’. Contenta de estar desde hace tres años en Telefe, con este exitazo. ¡Yo creo que se van a volver locos con esta temporada! Agradecida de lo lindo que es tener una familia y tener salud. Uno entra en el acelere de que mientras estoy grabando Bake Off estoy pensando en quién la tiene que buscar a Olivia, a Baltazar, quién está en casa, qué voy a hacer de comer a la noche. Lo importante es poder respirar conscientemente, oxigenando el cuerpo. Estar en el aquí y el ahora que es lo único que hay. Muy agradecida de lo que tengo.
Foto: Telefe